Desde Posadas, Misiones

Si no fuera por los pasacalles y los afiches, sería difícil darse cuenta de que faltaban minutos para que comenzara el comicio. Bien se podría decir que la procesión va por dentro. En esta pequeña provincia, apenas el 2 por ciento del padrón nacional, se estaba por desarrollar la primera pelea a cara descubierta entre el proyecto de transversalidad que impulsa Néstor Kirchner y la continuidad de las estructuras partidarias tradicionales que defiende Eduardo Duhalde. Es allí donde cobra importancia la puja por quién se queda con la gobernación local. La disputa es descarnada, tanto que el kirchnerista y aspirante a retener la gobernación, Carlos Rovira, no sólo se enfrenta al menemista Ramón Puerta –con todo lo que ello significa–, sino también al respaldo que el actual senador recibió del bonaerense. La definición, se especula, será voto a voto.
Ayer, la plaza 9 de Julio, la principal de la capital provincial, hacía las veces de un gran patio de juego para niños que saltaban en peloteros inflados o paseaban en autitos impulsados a batería. Los misioneros paseaban con cierto aire bucólico, como dejando pasar las horas. Los bares estaban completos, de parroquianos y de aquellos que muestran sus muñecas vendadas de relojes truchos para vender. No había clima electoral. “Culpable, sos la única culpable”, repetía una y otra vez Vicentico desde unos parlantes que anunciaban su espectáculo en pocos días más. Anochecía en Posadas cuando Puerta emprendió el viaje a Apóstoles, su ciudad natal, donde votará y esperará el resultado. Rovira no abandonó en todo el día la residencia oficial. Desde allí controlará hoy el comicio.
Uno y otro confían en que su triunfo está garantizado gracias a la Ley de Lemas. En esta provincia, el lema es la fórmula para gobernador y vice, después, se pueden inscribir todos los sublemas posibles para el cargo de intendente. Así, Rovira se recuesta en los más de 350 sublemas que tiene su Frente Renovador. Puerta hizo lo mismo.
El actual senador nacional cree, además, que corre con una ventaja. El 90 por ciento de los casi cincuenta municipios que controla el PJ le responden sin chistar. “Allí residirá la razón de mi triunfo, en los intendentes que llevarán la gente a votar”, dice Puerta que, a pesar de que lo niegue, se aprovecha de esta situación para “colarse” ante el tradicional escaso corte de boleta y arrebatarle la gobernación a su ex amigo Rovira. Tanto se concentró en ello que Puerta consiguió que Recrear apoyara su candidatura y que Alfredo Abrazian, a la sazón cuñado de Domingo Cavallo y hasta no hace mucho enemigo acérrimo, aceptara integrar uno de los sublemas para intendente por Posadas.
Curiosamente, el gobernador también cree que los intendentes lo beneficiarán. “Muchos son puertistas, pero saben que a Puerta la gente no lo quiere. Entonces cortarán boleta para preservarse. Ellos reelegirán y yo continuaré gobernando”, lo escucharon decir a Rovira sus allegados. Incluso, algunos de sus funcionarios relataron a este diario que durante la mañana de ayer unos 18 intendentes que reportan a Puerta llamaron para confirmar que favorecerán el corte de boleta para el actual gobernador: “No se olviden de lo que hicimos por ustedes”, fue la frase que más se escuchó en los despachos de “La Rosadita”, tal como se conoce la casa de gobierno local. Rovira se entusiasma con transformarse en el primer gobernador de la transversalidad: “Si ganamos, patentamos el proyecto”, repite en los pocos momentos en que logra distenderse.
Por ahora, reina entre los roviristas una cierta confianza con el resultado electoral. Hasta se animan a decir que el Tango 01 debe estar listo para traer a Kirchner para el festejo. No hay confirmación de que el Presidente se traslade a Misiones en caso de un triunfo rovirista. Lo que sí es verdad es que Duhalde se fue ayer de Misiones. Sus colaboradoresseñalaron que el ex presidente no considera conveniente esperar la definición junto a Puerta: teme que en caso de un triunfo puertista su presencia pueda ser tomada como una provocación a Kirchner. Y tampoco le gusta la idea de quedarse a acompañar a un perdedor. Así, Duhalde se dedicó a pescar –sin éxito– en el Paraná durante el viernes y el sábado.
La definición será voto a voto, cerca de la medianoche de hoy Posadas sabrá quién gobernará los próximos cuatro años. Sin embargo, más allá de los guarismos y su peso relativo en el padrón electoral nacional, el resultado de este pequeño distrito tiene un alto peso político para las aspiraciones del Presidente.