Los cuestionarios de los diputados quedaron sin respuesta por la muerte del fiscal Alberto Nisman. Las opiniones, interpretaciones y peticiones de las bancadas opositoras fueron por separado, donde no faltaron reproches mutuos. La macrista Patricia Bullrich mantuvo la convocatoria de la reunión informal de la Comisión de Legislación Penal, a la que iba a asistir Nisman y a la que sólo acudieron sus compañeros de bloque –además de dos diputados de la CC y uno del FIT–: allí, difundieron un petitorio de cinco puntos, entre ellos “preservar el equipo de Nisman” y continuar la investigación de su denuncia contra el Gobierno. Los radicales fueron los primeros en enfrentar a los periodistas para manifestar la “gravedad institucional” del caso, y el senador Ernesto Sanz pidió “que la sociedad se movilice para que no haya impunidad”. El diputado y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, pidió desde Tigre sesiones extraordinarias del Congreso para “revocar” el memorándum con Irán. Desde el FA-Unen, Julio Cobos, Hermes Binner y Margarita Stolbizer pidieron que la Corte Suprema se haga cargo de la investigación de la muerte del fiscal, su denuncia contra el Gobierno y la causa AMIA.

La reunión de la comisión en la que iba a acudir ayer por la tarde Nisman había despertado muchas expectativas. La amplia sala del Anexo C de la Cámara baja estaba abarrotada de cámaras de TV y periodistas, pero había pocos legisladores en sus asientos. La mayoría respondía al macrismo. A los diputados PRO Federico Pinedo, Laura Alonso, Federico Sturzenegger, el rabino Sergio Bergman y Héctor Baldassi, entre otros, se sumaron los senadores Gabriela Michetti y el ruralista Alfredo De Angeli. Silvia Majdalani, la única integrante macrista de la bicameral de Seguimiento de los Servicios de Inteligencia, no fue de la partida. También estuvieron presentes los diputados de la CC Pablo Javkin y Fernando Sánchez, el ahora massista Francisco de Narváez, y Néstor Pitrola, del FIT. Sobre el final, también se hizo presente la legisladora porteña Graciela Ocaña.

Bullrich lamentó la ausencia del resto de las bancadas y leyó el documento de cinco puntos que todos suscribieron: “Acompañamiento a la familia y al equipo del fiscal Nisman; requerir a las autoridades que tomen las medidas necesarias y suficientes para preservar el funcionamiento y la seguridad del equipo conducido por Nisman; exigir a todos los organismos competentes que mantengan la investigación y las pruebas recogidas por Nisman; garantizar que el fiscal que se designe en reemplazo de Nisman tenga la idoneidad, ética y valores indiscutibles para la tarea encomendada; requerir una investigación seria y responsable sobre la muerte del fiscal”.

Pitrola avaló el petitorio y reclamó la desclasificación de los documentos de los servicios de inteligencia, que minutos antes había anunciado el Gobierno. Luego, su colega del FIT Nicolás del Caño sumó: “La sospechosa muerte de Nisman se da en el marco de un pase de facturas entre distintas camarillas del Estado”.

“Es lamentable que un sector del Estado (la ex SIDE) esté fuera del control político”, agregó Javkin.

Antes, el radicalismo convocó a su propia rueda de prensa en un despacho del Congreso. “Que la sociedad se movilice para que no haya impunidad. En defensa de una democracia plena. Para que no gane el miedo. Que haya justicia”, dijeron sus legisladores encabezados por el senador Sanz y el jefe del bloque de diputados, Mario Negri.

Sanz pidió además que la Justicia “resguarde” al equipo que trabajaba con Nisman y las pruebas que presentó contra la presidenta Cristina Fernández, el canciller Héctor Timerman, el diputado Andrés “Cuervo” Larroque y otros dirigentes sociales. “Es el golpe más fuerte a la democracia desde el ’83”, concluyó el senador radical. “Hay que terminar con el secretismo. Volvieron la oscuridad y la noche a la Argentina”, sumó Negri, rodeado por sus correligionarios Ricardo Alfonsín, Ricardo Buryaile y Miguel Bazze, entre otros.

Poco después de terminado el frustrado encuentro de la comisión, a pocos metros de allí, en un edificio de la Cámara baja, el FAP daba su opinión. Stolbizer, Binner y Cobos pidieron que la Corte Suprema tome en sus manos las causas de la muerte de Nisman, su denuncia contra el Gobierno y la voladura de la mutual judía. “Ante la gravedad institucional que atravesamos, creo que la Corte debe tomar estos temas”, respaldó Cobos el planteo de Stolbizer. Binner opinó en el mismo sentido. Humberto Tumini, de Libres del Sur, alentó la “movilización ciudadana para evitar la impunidad” y cuestionó a Bullrich por la “utilización política” de su convocatoria tras la muerte del fiscal.