El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, protagonistas de la agitada interna del Frente para la Victoria bonaerense, ayer hablaron justo antes del inicio de la veda y ambos lo hicieron buscando llevar tranquilidad de cara a los comicios. Fernández descartó ayer cualquier posibilidad de que mañana haya fraude. “No, nunca jamás”, cerró la discusión el jefe de Gabinete. Domínguez, en tanto, se lamentó por las denuncias que involucraron a su rival en la última semana. “Les hacen mal a la política, a todo el gobierno”, sostuvo.

Como es habitual, Aníbal Fernández habló con los periodistas al ingresar, muy temprano, a la Casa Rosada. “No puede haber fraude. Sume todas las actas y les dará el resultado real. No puede haber fraude. Dígame, ¿cómo se hace?”, respondió Fernández cuando lo consultaron sobre las declaraciones del candidato de Cambiemos, Mauricio Macri, quien habló de un posible “robo de boletas” en el cuarto oscuro.

El jefe de Gabinete consideró que en las últimas elecciones desde la oposición siempre se ventiló en los días previos la posibilidad de algún tipo de fraude. Sin embargo, Fernández sostuvo que “en los últimos años en la Argentina no ha existido nunca, por una realidad ine- vitable que es la presencia en las mesas de las autoridades, que tienen que estar presenciando y controlando cómo se hace el escrutinio” y que “se quedan en el acto una vez que terminó la elección”. También lo consultaron sobre el acto de intimidación que denunció su archienemiga Elisa Carrió antes de su acto de cierre. “Solidarizarme, no puedo hacer otra cosa”, dijo Aníbal Fernández acerca del episodio.

En tanto su adversario, Julián Domínguez, subió una foto a Twitter en la que se mostraba en la iglesia de San Cayetano. Antes, hizo sus últimas declaraciones por radio en las que lamentó cómo “se ensució todo en la campaña en la provincia”, en referencia al informe periodístico que involucró a Aníbal Fernández con el tráfico de efedrina. “Vamos a tratar de poner sobre lo hecho una visión esperanzadora, positiva. Que no se dañe más gente”, dijo Domínguez. El presidente de la Cámara de Diputados dijo que acusaciones como las que le hicieron a Fernández “les hacen mal a la política, a todo el gobierno. Por eso expresé mi solidaridad política y personal”.