Desde Tucumán

Como anticipó Página/12 en su edición del domingo pasado, anoche, pasadas las 20.30, el secretario electoral de la Junta Electoral de Tucumán, Darío Almaraz, leyó frente un grupo nutrido de periodistas en la sede de la junta, los resultados finales del escrutinio definitivo llevado adelante desde el pasado martes 25 de agosto. Los números que dio a conocer Almaraz no son muy distintos a los que se conocieron por el escrutinio provisorio; el candidato del Frente para la Victoria (FpV) Juan Manzur, obtuvo el 51,64 por ciento de los votos (491.951 sufragios) en segundo lugar quedó el radicalmacrista José Cano del Acuerdo para el Bicentenario (ApB), que logró el 39,94 del padrón electoral (380.418 votos). La diferencia a favor del ex ministro de Salud de la Nación fue de 111.533 votos. En tercer lugar, y muy lejos de los dos primeros, quedó el partido que fundó el genocida Antonio Domingo Bussi, obtuvo el 3,14 por ciento (29.904 votos).

Mientras Almaraz leyó el acta completa de escrutinio final (tres fojas), el presidente de la junta y titular de la Corte Suprema provincial, Antonio Gandur, seguía de cerca las palabras de su secretario. Luego de finalizar el texto, Almaraz contestó las preguntas de los periodistas que esperaban saber los últimos datos. Un grupo de más de treinta empleados de la junta festejó con aplausos y cantitos que el proceso haya finalizado ya que desde el hace 20 días que los empleados trabajaron en turnos de 16 horas diarias de lunes a sábados para poder terminar con el conteo de las 3601 urnas que se utilizaron en la elección del 23 de agosto.

Cuando se le insistió al funcionario de la junta sobre las cámaras de seguridad del edificio que se denunció que no funcionaban y hubo días que no registraron lo ocurrido dentro del galpón donde Gendarmería Nacional custodiaba las urnas, Almaraz dijo, “reitero, las urnas nunca han dejado de estar bajo vigilancia de Gendarmería”.

Durante toda la jornada, en la sede de la junta se fueron conociendo los datos del día. Pasadas las 19, sólo faltaban 100 mesas por escrutar y ya la diferencia a favor de Manzur era de 100 mil votos. Cabe destacar, que los fiscales de los partidos del Acuerdo para el Bicentenario también estuvieron presentes en la junta, dato que no coincidió con los dichos de sus dirigentes que habían anticipado en algunos medios que se iban a retirar del comicio desde el viernes pasado para no validar las elecciones y los números que ésta arrojó.

Los casi 12 puntos de diferencia confirmaron las cifras del escrutinio provisorio. Este fue interrumpido cuando, con el 81 por ciento de las mesas escrutadas, mostraba una ventaja de casi 14 puntos del FPV. La diferencia se achicó unos dos puntos porque buena parte de las mesas faltantes correspondían a la Capital de Tucumán, donde la oposición logró una amplia ventaja.

Desde la Casa de Gobierno provincial también seguían de cerca lo que ocurría en la junta, ya que esperaron hasta la lectura final de los números del comicio para festejar y Juan Manzur proclamarse ganador de las elecciones. Eso, a pesar de que una decisión de la Sala III de la Cámara en lo Contencioso Administrativo le ordenó a la junta no proclamar ganadores hasta no resolver la cuestión de fondo de la presentación realizada por Cano, es decir, si las pruebas que presentó el candidato de Mauricio Macri ameritan a declarar la nulidad de los comicios.

Teniendo conocimiento de los resultados que se difundían en Tucumán, Cano trató por los medios de comunicación locales y nacionales de deslegitimar el comicio.

“Hoy (por ayer) está invalidado por la Justicia a tal punto que la Junta Electoral no puede proclamar absolutamente a nadie. Ese es uno de los alcances que tiene la medida cautelar dictada por la Cámara en lo Contencioso Administrativo. Ayer, el Gobierno hizo su descargo de parte con respecto a la presentación que nosotros hicimos, lo propio hizo la Junta Electoral y, hoy, es la Justicia la que tiene que, finalmente, dictaminar sobre nuestro planteo de fondo. Desde hace 12 años gobierna el mismo partido y tuvo mayoría absoluta en las Cámaras y escandalizó el sistema electoral porque no hizo absolutamente nada para mejorarlo. Los que se tienen que hacer cargo de haber pergeñado este sistema electoral son los que hace 12 años vienen gobernando la provincia”, dijo Cano.

Como se judicializó la elección, será el juez Salvador Ruiz, de la Cámara en lo Contencioso, quien deberá decidir durante esta semana si hacen o no lugar al pedido de Cano para anular el comicio. Cualquiera fuera el camino que tome la decisión es recurrible, vale decir, se podrá apelar el fallo ante la Corte Suprema de Justicia de la provincia. En esa instancia, algunos de los jueces del tribunal podrían ser recusados por la oposición por haber formado parte del gobierno de José Alperovich, lo que habrá que ver cómo se resuelve. Hasta el momento, el único integrante del máximo tribunal a quien no se cuestionaría para fallar en el conflicto electoral es René Mario Goane, el juez que se hizo famoso por tener declaraciones misóginas: “las mujeres quieren entrar a Tribunales para tener la tarde libre”, declaró alguna vez. Las contradicciones de una provincia donde el partido de Bussi volvió a quedar como la tercera fuerza política.