El kirchnerismo dio ayer el anteúltimo paso para proteger las acciones que tiene el Estado en empresas privadas. En un plenario de comisiones y con apoyo de sus aliados habituales, el FpV firmó el dictamen del proyecto que contempla la creación de la Agencia Nacional de Participaciones Estatales en Empresas (Anpee), que se convertiría en ley hoy al ser tratado en la Cámara de Diputados. La iniciativa establece que para vender alguna de esas acciones del Estado se necesitará la aprobación del Congreso Nacional, por dos tercios de los votos de ambas cámaras. “La intención es que su venta no sea definida por el mercado sino por el Parlamento, que no terminen siendo un bien devaluado y que se mantenga la participación del Estado en los directorios de estas empresas privadas”, aseguró ayer Roberto Feletti, titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara baja. Desde la oposición, tanto el radicalismo como el PRO y otros bloques cuestionaron la medida por su falta de “flexibilidad”.

En la sesión de hoy se completará el recorrido iniciado con el anuncio de Cristina Fernández, el 21 de agosto pasado. En aquel momento, la presidenta adelantó por cadena nacional el envío al Congreso del proyecto que declara de “interés público” las acciones que el Estado argentino heredó al estatizar las AFJP y que hoy se encuentran en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad. La semana pasada la propuesta consiguió media sanción del Senado y, al igual que lo habían hecho en la Cámara alta, el lunes asistieron a Diputados el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el titular de la Anses, Diego Bossio. Durante la reunión, Kicillof explicó a los diputados que lo que plantea el proyecto “es poner ciertas reglas restrictivas para que no se pueda disolver la participación estatal”. “Nosotros creemos que la finalidad de coordinación y de instrucción que tiene esta Agencia Nacional es fundamental para tener un manejo desde la política y desde la administración del Estado en función de preservar este patrimonio”, argumentó ayer el diputado krichnerista Mario País.

En sintonía con la postura adoptada en el Senado, los legisladores de la oposición criticaron el proyecto. El radical Luis Pastori anticipó que su bloque presentará un proyecto propio, igual que Fernando Sánchez, de la Coalición Cívica y que Margarita Stolbizer y Alicia Ciciliani, del GEN y el PS. La candidata presidencial de Progresistas cuestionó que el kirchnerismo impulse este proyecto “a 60 días de terminar su mandato”. “Lo único que les interesa es seguir creando organismos, nombrando amigos en cargos claves y perturbar la gestión del gobierno que los suceda, aunque sea de su mismo frente”, afirmó Stolbizer, mediante un comunicado.

Claudio Lozano, de Unidad Popular, si bien consideró “innecesaria” la creación de la Anpee, rescató la protección del patrimonio estatal y la decisión de hacer pasar por el Congreso una eventual enajenación de esos bienes públicos.

Según el ex ministro de Economía y diputado de Sumá+, Martín Lousteau, “cada vez que le ponemos restricciones a la manera de operar el Fondo (de Garantía de Sustentabilidad) lo que hace es bajar la rentabilidad”. “¿Por qué nos tenemos que quedar anclados con acciones que no se eligieron? A mí el argumento de que pasan a ser activos específicos no me convence”, afirmó el diputado, quien consideró que el FGS “actualmente rinde menos que el Merval”.

El macrista Federico Sturzenegger se quejó de la “falta de flexibilidad del proyecto, dado que cuando se quieran vender las acciones se tiene que anunciar, pedir autorización al Congreso, y así se pueden bajar el valor de las acciones”.

El texto aprobado en el Senado estipula que la Anpee contará con un directorio de cinco miembros, presidido por el titular de la Anses. Los cuatro directores restantes serán el ministro de Economía, un funcionario a designar por el Poder Ejecutivo y dos más en representación de la mayoría y la minoría de la comisión bicameral permanente creada por la propia ley. El dictamen ayer fue firmado por el FpV, el Frente Cívico por Santiago del Estero, Partido Solidario y el Movimiento Popular Neuquino. El grueso de la oposición, en cambio, optó por firmar “en disidencia total”. De todas formas, fuentes del bloque oficialista esperaban para hoy una aprobación sin mayores inconvenientes.