La gobernadora electa María Eugenia Vidal recibió un llamado de quien le entregará el mando, Daniel Scioli. Además de saludarla y felicitarla, con Scioli hablaron de “operativizar la transición”, según indicaron en el macrismo. Vidal designó emisarios con ese propósito: a su mano derecha, Federico Salvai, y al economista Hernán Lacunza, a quien puso a supervisar la aprobación del Presupuesto 2016. Ellos se reunirán con el actual jefe de Gabinete, Alberto Pérez, y la ministra de Economía, Silvina Batakis. De todas formas, las conversaciones todavía no arrancaron.

Lacunza es uno de los pocos confirmados en el gabinete de Vidal al frente del área económica, según confirmaron cerca de la candidata. Los otros dos son el ex gerente de Monsanto Leonardo Sarquís, quien ocupará el ministerio de Asuntos Agrarios, y el vicepresidente primero de la Legislatura porteña, Cristian Ritondo, a quien ubicarán en un ministerio político, aunque también se lo menciona para Seguridad. Los demás, son nombres en el viento.

Entre esos nombres que vuelan en torno de Vidal se menciona a Jorge Macri para la Jefatura de Gabinete, al ministro de Espacio Público porteño, Edgardo Cenzón, para un área de infraestructura, y al ex jefe de la Policía Metropolitana Eugenio Burzaco para Seguridad. Pero la confirmación de estos funcionarios depende mucho de si Mauricio Macri consigue ganar el ballottage. En ese caso, puede que Burzaco sea requerido en el ámbito nacional o en la Ciudad.

Entre llamadas a los intendentes de Cambiemos –Vidal tendrá el respaldo de 65 intendencias de las 135–, la gobernadora electa se refirió a lo que hará con la Policía Bonaerense: “No vengo ni a hacer sólo purgas ni a darles sólo respaldo. Vengo a hacer las dos cosas”. “La mayoría de los policías, y lo sé porque algunos de ellos forman parte de la Policía Metropolitana, son personas que quieren trabajar y sentirse respaldados por el Gobierno, por un Estado que los respalde y los cuide para que, a su vez, ellos puedan cuidar a los ciudadanos”, afirmó sobre la Bonaerense.

Aseguró que, a su vez, la policía “necesita ser controlada y rendir cuentas de lo que hace”.

El intendente electo de Morón (y marido de Vidal), Ramiro Tagliaferro, sostuvo que “la policía es un tema que va a requerir muchísimo trabajo. Va a ir a un formato más tendiente al de la Metropolitana en términos de rejerarquizar a la institución, de poner más claras las reglas del juego”. La Bonaerense fue sujeta a sucesivas purgas y terminó con la carrera de más de un Ministro de Seguridad bonaerense.

Tagliaferro se mostró confiado a que se terminó la época de “los barones del conurbano como una máquina de impedir”. Sobre eso, Ritondo –que estará a cargo de la relación con el PJ bonaerense– indicó que “la mayoría de los intendentes bonaerenses quieren lo mejor para sus municipios, trabajando a la par con el gobierno de la provincia. Cuando uno ve que los principales dirigentes en la provincia perdieron sus intendencias, vemos que está ocurriendo un cambio”. Sobre los bloques pequeños que tienen en el Congreso, Ritondo se mostró confiado en encarar el desafío: “En la Ciudad nunca tuvimos mayoría. Quienes quieran oponerse por la oposición misma, quedarán expuestos ante la sociedad”.