EL PAíS › CRUCES ENTRE LOS CANDIDATOS
Los candidatos a presidente del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, y de Cambiemos, Mauricio Macri, se cruzaron ayer en torno a la “campaña del miedo” que, desde la oposición, le atribuyen al oficialismo. El miedo “jamás” fue su estilo, aseguró el gobernador bonaerense. “Lamentablemente van por todo”, se quejó su rival, que hasta bromeó respecto a las acusaciones que recibe, diciendo que su hija le preguntó si “en serio”, en caso de llegar a la presidencia, “los huevos Kinder van a venir sin sorpresa”. El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, y la legisladora Elisa Carrió, también tallaron en el debate.
“Si sacan subsidios, o se piensa que los salarios son un costo, o el cuestionamiento a que haya universidades como hicieron la semana pasada o a la gratuidad de las mismas, no se trata de miedo sino a lo que ya pasó en la Argentina y no querer volver a una mirada neoliberal que ha perjudicado a los trabajadores, a los jubilados”, aseguró Scioli, consultado al respecto. En ese sentido, aseguró que las manifestaciones en su apoyo surgidas los próximos días “no están impulsadas por el miedo sino por la memoria”.
Por su parte, Macri pidió a sus simpatizantes que no se “enganchen” con “todas estas locuras que dice el Gobierno” y acusó a Scioli de “avalar” esa “estratagema” en su contra y “hacerse el distraído” ante lo que, asegura, son agresiones. “Lamentablemente van por todo. Yo pensé que Daniel Scioli tenía otros valores, que era una buena persona y que no iba a liderar una campaña de este tipo –agregó–. Todas estas estratagemas del miedo, con las cuales nos han gobernado durante todos estos años, llegaron a su fin porque nos animamos a votar algo distinto.”
En tanto, la diputada de Cambiemos Elisa Carrió acusó al gobierno nacional de hacer “terrorismo para meterle miedo a la sociedad” y aseguró que “asustar a los pobres con la pérdida de derechos es un crimen moral que no tiene perdón de Dios”. En un comunicado, la referente de la Coalición Cívica aseguró: “Nos comprometemos a mejores derechos, más ingreso ciudadano, el 82 por ciento para los jubilados y bajar la carga impositiva. No está en nuestras cabezas y políticas empobrecer a la sociedad, sino hacer prosperar a todos”.
Por su parte, el titular de la Cámara baja, Julián Domínguez, descartó que el kichnerismo impulse una “campaña del miedo” sino que buscan que el electorado tenga “memoria” de lo que cada espacio “votó e hizo” durante los últimos años. “Macri cree que el salario es la variable de ajuste para que nuestros productos recuperen competitividad y así poder exportar” porque “responde a los intereses del 1 por ciento de la población más rica de la Argentina”, completó.
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