El Parlamento podrá sesionar hasta el día antes del recambio legislativo del 10 de diciembre. El gobierno nacional publicó ayer en el Boletín Oficial el decreto que, con la firma de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, “prorroga las sesiones ordinarias del Congreso hasta el 9 de diciembre de 2015”, lo que habilita que los legisladores puedan impulsar sus propios proyectos si alcanzan el consenso necesario como para llegar al recinto y ser aprobados. El Frente para la Victoria (FpV) aún tiene en carpeta algunas iniciativas pendientes, como el régimen de promoción de juventudes que establece un mecanismo de actualización automática del plan Progresar que el Senado debe tratar para convertir en ley, además de la Ley de Acceso al Hábitat y el tratamiento de pliegos de nombramientos de jueces. En Diputados, el oficialismo se prepara para discutir el proyecto anunciado por la Presidenta que establece la incorporación de científicos a un régimen de jubilación especial. La UCR, en cambio, se puso en guardia y calificó a la prorroga como “una caja de Pandora”.

Esta vez la decisión del Gobierno de ampliar el año parlamentario hasta el 9 de diciembre fue a través de la “prórroga de sesiones ordinarias”, que culminan el 30 de noviembre, por lo cual los legisladores de ambas cámaras pueden promover el debate de sus propios proyectos. Un tema que les estaría vedado si la convocatoria hubiera sido a “sesiones extraordinarias”, donde el temario lo fija el Poder Ejecutivo.

De todas maneras, la prórroga le servirá al oficialismo para avanzar en temas pendientes que impulsó el Gobierno. En el Senado, el FpV buscará aprobar la ley de promoción de juventudes, que tiene media sanción de la Cámara baja y establece un marco jurídico sobre “el reconocimiento de derechos, deberes y garantías” para la población de entre 15 y 29 años, crea seis organismos destinados a su cumplimiento y establece la actualización automática del Plan Progresar.

Los senadores del FpV también tienen previsto convertir en ley el proyecto del Ejecutivo de Acceso al Hábitat, a través de la cual el Estado podrá “financiar la compra de tierras ocupadas irregularmente, tendrá un registro de viviendas y barrios informales para focalizar sus políticas y financiará a las provincias, la CABA y municipios en los recursos para la regularización”. Además de recibir y tratar los pliegos de designación de jueces que el Gobierno envió a la Cámara alta (ver aparte).

En Diputados, el FpV se prepara para darle impulso al anunciado proyecto presidencial de incorporación de científicos a un régimen de jubilación especial. La prórroga le dará tiempo a la bancada oficialista en la Cámara baja para elaborar su propio listado, que podría incluir la Ley Antidiscriminatoria que en la Marcha del Orgullo reclamaron las organizaciones por la diversidad sexual y que tiene dictamen de la Comisión de Derechos Humanos, pero todavía no fue abordado por la de Legislación Penal, que preside la macrista Patricia Bullrich.

La presidenta del bloque del FpV, Juliana Di Tullio, había planteado durante la última reunión de Labor Parlamentaria a las bancadas opositoras que preparen sus proyectos que no tengan observaciones ni disidencias para organizar una sesión de fin de año. Pero el escandaloso rechazo opositor a la designación de dos nuevos integrantes de la Auditoría General de la Nación (que le corresponden a la primera minoría parlamentaria) y el reclamo de que éstsa se realice con la nueva composición parlamentaria que asumiría el 10 de diciembre –que no modificará la actual estructura de minorías legislativas– pusieron en duda la iniciativa del oficialismo.

La prórroga parlamentaria alertó a la UCR. El jefe del bloque de diputados, el cordobés Mario Negri –que en la última sesión reclamó sesiones ordinarias– definió a la convocatoria como “una caja de Pandora”. “No sabemos si es para condicionar al próximo gobierno aún más o para tratar de conseguir lugares en el Estado y dejar más lugares para militantes de La Cámpora”, chicaneó el radical.