Scioli y Galuccio, en la sede de la compañía. El candidato aseguró que él es “un defensor de lo público”.

Daniel Scioli volvió a marcar las diferencias que lo separan de su rival Mauricio Macri. Ayer se refirió al futuro de YPF, luego de reunirse con el titular de esa compañía, Miguel Galuccio. Tras criticar las declaraciones del referente de Cambiemos en materia de energía, el ex gerente de Shell Juan José Aranguren, el candidato del Frente para la Victoria sostuvo que él es el único de los dos contendientes que quedan en la carrera a la presidencia que “garantiza para los intereses argentinos la continuidad de YPF en manos del Estado y de las provincias”.

Aranguren “dijo que iba a revisar el tema de YPF, sus acuerdos y luego definir que no era tan importante el autoabastecimiento energético” por lo que “es evidente que se está desenmascarando aquí una intencionalidad de ir por YPF”, denunció Scioli desde la sede de la petrolera, tras una reunión con su CEO. El candidato peronista señaló que él es “un defensor de lo público” mientras que desde Cambiemos “quieren llevar adelante un avasallamiento y dejar todo librado al mercado o a los intereses de algunos privados”.

Por eso, el gobernador bonaerense pidió a “las provincias petroleras y el conjunto del país” se pongan “en alerta” ante “una situación muy grave” ya que “YPF hace a la soberanía energética, hace al interés nacional de las provincias” y mientras “la industria petrolera del mundo ha perdido 200.000 puestos de trabajo. Argentina ha mantenido un precio sostenido gracias a la recuperación” de la compañía.

Desde Cambiemos, sostuvo Scioli, en base a las declaraciones de Aranguren, “evidentemente quieren retroceder sobre esto y privilegiar los intereses y llevarlo adelante con la mirada de Shell”. El candidato completó: “Ya hemos visto lo que ha ocurrido cuando esto queda en mano de otros intereses que no sean los intereses argentinos”.

Finalmente, insistió con que “el 22 de noviembre lo que se vota va mucho más allá de un candidato u otro” porque se elige entre “mantener los intereses nacionales y lo público por sobre la lógica de los que quieren dejar todo librado al mercado y llevar adelante políticas de retrocesos sobre conquistas y avances que van a impactar positivamente en el conjunto de la economía”.

En medio de la vorágine electoral, la de ayer fue una jornada tranquila para el candidato, que además de la entrevista con Galuccio no llevó adelante otras actividades de campaña. En diálogo con la prensa, dio algunas definiciones más de cara al debate que mantendrá el domingo con Macri. El líder del PRO “no dice lo que va a hacer” si llega a la Casa Rosada, denunció Scioli, que en el debate intentará “desenmascarar qué hay detrás de la palabra cambio” que articula el discurso opositor.

“Espero que los contenidos sean profundos, concretos, y no sean consignas dictadas por un asesor de marketing. La palabra cambio puede ser muy convocante pero tienen que decir qué quieren cambiar y preguntarnos qué cambio queremos” ya que la palabra “cambio” y el concepto de “la revolución de la alegría” no son más que “frases marketineras que quieren, en medio de una campaña, venderle a la gente una felicidad que no les van a dar”, agregó.

En ese sentido, sostuvo que “no es casualidad que para cada área tiene pensado poner un referente del sector privado”, en referencia a los anuncios que ha hecho hasta ahora Macri respecto a sus futuros equipos de gobierno. Para Scioli, los economistas de Cambiemos “están preparando el terreno para llevar adelante una gran devaluación, un ajuste que destruya el poder adquisitivo del salario”.

Hoy, el candidato peronista tiene previsto visitar por la mañana la provincia de Córdoba, uno de los bastiones donde la oposición obtuvo mejor resultado en las elecciones del 25 de octubre. Por la tarde, visitará nuevamente el populoso partido bonaerense de San Martín, donde estará en un centro de jubilados junto al titular de la Anses y diputado electo, Diego Bossio.