Luego de varias idas y vueltas, el ministro de Educación, Esteban Bullrich, decidió convocar a los cinco gremios docentes nacionales para retomar hoy la discusión paritaria. El demorado anuncio llegó a tan sólo cinco días del inicio de las clases, luego de que la Ctera presentara una intimación formal ante el Ministerio de Trabajo para que el Gobierno reactivara la negociación. Hasta ayer, el diálogo se mantuvo congelado luego de que Bullrich cancelara dos reuniones consecutivas en las que los gremios esperaban la firma del acta con la propuesta oficial de un 40 por ciento de aumento para el salario inicial, que fijara un piso para la discusión en las provincias. Desde el Ministerio de Educación aseguraron a Página/12 que la intención es concretar la firma “de la misma propuesta” anunciada públicamente por Bullrich hace ocho días pero nunca confirmada formalmente, después de que el propio presidente, Mauricio Macri, afirmara que los aumentos no podían superar el 25 por ciento. “Esperamos que sea la misma propuesta y se abra el dique para las negociaciones provinciales, que vienen retrasadas”, evaluó el secretario general de UTE-Ctera, Eduardo López.

La oferta anunciada por Bullrich consistía en un aumento del 40 por ciento en dos cuotas para el sueldo del maestro que inicia su carrera, que hoy es de 6060 pesos. Ese sueldo, que lo cobra sólo un 8 por ciento de los docentes y en pocas provincias, pasaría a 7800 pesos a partir de febrero y llegaría a 8500 pesos a partir del 1º de julio. En ambos tramos del aumento está incluida una mejora del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), que paga la Nación: 300 pesos en la primera cuota y 500 en la segunda.

Si el Gobierno confirma hoy esa oferta, que había sido bien recibida por los gremios docentes, se comenzaría a cumplir con la Ley de Financiamiento Educativo, que establece que primero se fija el salario inicial nacional y luego se acuerda el resto de los sueldos de las provincias. Algo que desde la semana pasada el Gobierno pretendía hacer al revés.

La oferta que se oficialice hoy será analizada por los docentes durante el congreso previsto para el viernes, día en el cual, aseguró López, se definirá si resulta satisfactoria y si efectivamente el lunes 29 comienzan las clases o no. Si bien López calificó el anuncio como “importante”, dejó abierta la posibilidad de un conflicto si las propuestas a nivel provincial quedan lejos de lo esperado.

“El acta alcanza al 8 por ciento de los docentes. Lo que queda por resolver es el salario del 92 por ciento restante, que se discute en las provincias, para lo cual el Gobierno nos hizo perder ocho días muy valiosos. Si hacen una oferta ínfima, va a haber conflicto”, advirtió López. Cuando Macri planteó que el número del aumento no debía superar 25 por ciento, también aseguró que “muchas (provincias) dijeron que pueden poner mucho menos”.

Ayer, el llamado del ministerio llegó durante una reunión que mantenían representantes de los cinco gremios nacionales (Ctera, UDA, Sadop, AMET y CEA) en la sede central de Ctera, donde se encontraban evaluando las medidas a tomar luego de la intimación presentada ante el Ministerio de Trabajo. Hasta ese momento, con la paritaria nacional congelada y los ofrecimientos del 24 por ciento en la provincia de Buenos Aires y del 22 en Ciudad –ambos rechazados– el inicio de las clases se veía comprometido. Esta semana, el clima se tensó aún más cuando el secretario general de Suteba, Roberto Baradel, denunció haber recibido amenazas a través de su hija, quien recibió un correo electrónico que le exigía a su padre firmar un acuerdo “porque si no vos y tus hermanos van a ser boleta”. Rápidamente, Bullrich expresó su solidaridad con el dirigente y afirmó que “estos hechos no deben tolerarse nunca”.

Este mediodía los representantes gremiales acudirán a la reunión con Bullrich –de la que también participarán el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y representantes del Consejo Federal de Educación– “a la expectativa, con la voluntad de que las clases empiecen, pero sin resignarnos a perder poder adquisitivo”, aseguró López. E insistió en que “si la oferta no se acopla en los márgenes suficientes en las provincias, estamos en un problema”. Aunque el diálogo volvió a abrirse, los gremios docentes aportarán a la marcha de hoy convocada por ATE contra los despidos en el Estado una de las columnas más nutridas.

Hace una semana, Bullrich anunció públicamente el aumento del 40 por ciento en dos tramos para el salario inicial, a pesar de que nunca había firmado el acta. Pese a la buena recepción de los gremios, el Gobierno se retractó tras una reunión que mantuvo el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, con gobernadores en Casa Rosada. “Se perdió un tiempo valiosísimo para avanzar”, consideró López. El Gobierno tiene apenas cinco días para cerrar los acuerdos si quiere que las clases empiecen el próximo lunes.

Informe: Matías Ferrari.