“Somos oposición, firme pero racional”, señaló ayer el diputado Oscar Romero, jefe de la flamante bancada del bloque justicialista que presentó su agenda legislativa. Con casi todos sus integrantes presentes (hubo 15 de 17 diputados) y con apoyo gremial extra, Romero adelantó que este espacio político impulsará la “reforma del impuesto a las Ganancias para elevar a 60 mil pesos el mínimo”, y adelantó que cuando llegan los proyectos para tratar el acuerdo con los fondos buitre iban a dar “quórum porque queremos dar el debate en el recinto, y porque además nos han votado para ir a trabajar”.

“Nuestra intención es trabajar fuertemente con trabajadores y gobernadores”, explicó Romero apenas comenzó la presentación formal del bloque en su primera presentación pública que se realizó en el Anexo C de la Cámara de Diputados. Mostrando el perfil más pejotista que los llevó a romper con el Frente para la Victoria, menos los legisladores de La Rioja Beder Herrera y Teresita Madera, el nuevo bloque se mostró en pleno. El gremialista de Smata y jefe de la bancada aseguró que el paquete de diez proyectos que intentarán impulsar en el recinto tenían el objetivo de “atenuar las últimas políticas aplicadas por el Poder Ejecutivo que afectan el poder adquisitivo”, enfocados principalmente en el impuesto a las Ganancias, un reclamo que se hizo escuchar con fuerza por los sectores gremiales en los últimos años.

Con el diputado Diego Bossio en segundo plano para bajar la exposición y el rechazo del kirchnerismo que lo acusa de ser el principal responsable de la ruptura del bloque del FpV, el gremialista Romero fue la voz cantante del nuevo agrupamiento. El respaldo de un sector del sindicalismo que apoyó al kirchnerismo durante sus doce años de gobierno se expresó en la presencia del taxista Omar Viviani, el dirigente del personal legislativo, Norberto Di Próspero, el mentor de Romero en Smata, Ricardo Pignanelli y Marcos Castro (Capitanes de Ultramar).

“Se quiere resolver el tema de los holdouts pero también hay prioridad para resolver el problema de los trabajadores y el de las provincias. No vamos a votar algo que sea mayor litigiosidad para la Argentina si no tenemos claro cuáles son las consecuencias para nuestro país”, explicó Bossio luego de anunciar que el bloque solicitará un informe a la Procuración del Tesoro, para que dictamine si el acuerdo al que llegó el Poder Ejecutivo cierra la posibilidad de nuevos litigios. La derogación de la ley cerrojo será uno de los temas que deberán tratar en lo inmediato en el parlamento, por lo que Romero adelantó que estaban “dispuestos a darle gobernabilidad al Gobierno nacional, pero también hay que darle gobernabilidad a las provincias y a los municipios”, empatando los términos que expuso Bossio pero agregó que ellos querían garantizar que “el acuerdo con los buitres no sea sólo para tapar agujeros. Que se cierre el proceso de desendeudamiento, pero que sea para crecer”. En la misma línea afirmó que iban “a dar quórum porque queremos dar el debate en el recinto, y porque además nos han votado para ir a trabajar”.

Entre los proyectos que presentarán en la Cámara resaltaron la reforma del impuesto a las Ganancias que incluye un nuevo mínimo no imponible de sesenta mil pesos mensuales, una actualización anual del impuesto por el índice de movilidad y nuevas alícuotas crecientes en función de los ingresos. A su vez se exime del pago del impuesto a jubilados y pensionados, embarazadas, a personas con discapacidad y el trabajo por horas extra, presentismo y productividad. Además figuran en la agenda las reformas en el régimen de Asignaciones Familiares, en el 82 por ciento móvil para los jubilados y el pago de sentencias judiciales y una prestación universal por vejez.