La canciller Susana Malcorra desmintió que la Argentina se esté “desmarcando” del Mercosur, como sugieren distintas acciones implementadas por el gobierno de Mauricio Macri para ingresar a la Alianza del Pacífico que impulsa Estados Unidos, y admitió que “como mercado integrado (el Mercosur) nos da un marco de negociación más amplio”. El Gobierno no impulsará “ni relaciones carnales ni distanciamientos que no sirvan”, aclaró, y agregó que el gobierno nacional debe “encontrar puntos medios que sirvan a los intereses de los argentinos”. La funcionaria defendió su postulación para ser secretaria general de la Organización de Naciones Unidas, que enmarcó en la decisión del Gobierno “de poner a la Argentina en el mapa del mundo”, y consideró que “plantear que hay un conflicto de intereses en su candidatura es no entender la decisión de que esto sea política de Estado”.

Al exponer en un plenario de comisiones de Diputados sobre los lineamientos de la política exterior, Malcorra calificó como “muy importante” que Macri viaje a Chile para el encuentro de presidentes de la Alianza del Pacífico el 1º de julio, aunque aclaró que la decisión no debe interpretarse como que “nos estamos desmarcando” del Mercosur. “El Mercosur está lejos de ser aquello a que aspiraron el presidente (José) Sarney y el presidente (Raúl) Alfonsín, pero tampoco podemos despreciarlo porque se ha avanzado muchísimo. Hagamos más Mercosur, no menos Mercosur, porque como un mercado integrado nos da un marco de negociación más amplio” para cerrar acuerdos con otros bloques como la Unión Europea, subrayó. Al mismo tiempo, defendió el acercamiento a la Alianza del Pacífico al sostener que el Gobierno cree “firmemente que plantear dicotomías entre el Pacífico y el Atlántico es negar la realidad geopolítica”.

Sobre la posibilidad de avanzar en un convenio comercial entre el Mercosur y la Unión Europea, Malcorra advirtió que “no va a ser fácil y nos va a llevar un tiempo”, pero apuntó que se busca “un acuerdo más amplio” ya que “Europa es nuestro segundo destino de comercio después de Brasil”. Respecto de los convenios firmados con Estados Unidos en la visita del presidente Barack Obama, aclaró que “no estamos hablando de un mercado de libre comercio” con ese país, “salvo que rompamos con el Mercosur”, hipótesis en la que no trabaja el gobierno nacional, aclaró.

Respecto del reclamo de soberanía por las Islas Malvinas, Malcorra señaló que Macri se juntó dos veces con el primer ministro británico, David Cameron, y consideró que “fue claro en la posición” del país cuando planteó que “ni siquiera hay opción para decidir si se le da o no prioridad” porque “es un mandato constitucional”. Agregó que “intentamos trabajar en el 80 por ciento” de aspectos en común que existirían con Gran Bretaña, en tanto en el 20 restante se busca “establecer pequeños pasos de construcción de alguna confianza mutua, en el entendimiento de que la causa va a llevar mucho tiempo para resolverse”.

En cuanto a la crisis políticas que afectan a Brasil y Venezuela, Malcorra aseguró que el Gobierno está “totalmente activo” y remarcó que “nada de lo que hemos hecho lo hicimos desde una posición vacía y abstracta”. En el caso de Brasil, estimó que “el proceso de impeachment” contra la presidenta Dilma Rouseff “ha cumplido con todas las formas legales” y agregó que “una cosa es la formalidad legal y otra la forma de legitimidad del proceso”. “Hay quienes cuestionan la legitimidad del proceso”, admitió, dejando en claro que no es el caso del gobierno de Macri. Sobre Venezuela, consideró que “hay dos visiones distintas de país que deberán sentarse a consensuar una salida hacia adelante” y destacó la importancia de “privilegiar el diálogo” ante “una situación muy compleja, de múltiples crisis”.