El canciller Rafael Bielsa se reunió ayer con el juez federal Rodolfo Canicoba Corral para proponerle que delegue en un cuerpo de fiscales la instrucción de la causa en la que se investiga el atentado contra la AMIA. Bielsa tomó así como propio el planteo que realizó la agrupación Memoria Activa para que la pesquisa quede en manos de un grupo de fiscales encabezados por Alberto Nisman. La agrupación, que reúne a parte de los familiares de las víctimas del ataque, formuló esa propuesta con el doble objetivo de que el pase del expediente de manos de Juan José Galeano –apartado del caso hace un mes– sea menos traumático y de preservar la figura de Canicoba Corral.
La reunión entre Bielsa y Canicoba Corral tuvo lugar en el despacho que el magistrado tiene en el tercer piso de los tribunales federales de Retiro y duró alrededor de media hora. En la Cancillería trataron de no dar mayor difusión al encuentro y de hecho fue el mismo juzgado el que lo dio a publicidad.
“El papel de Bielsa es el mismo que venía jugando cuando la causa estaba a cargo de Galeano”, explicaron en la Cancillería, donde recordaron que el funcionario “está tratando de conciliar, por expreso pedido presidencial, las posiciones de la comunidad judía en torno del pedido de justicia en el caso de la AMIA”. Bielsa estuvo analizando en los últimos meses con dirigentes judíos la posibilidad ahora casi descartada de que los funcionarios de Irán, a los que se acusa de haber participado en el atentado, sean juzgados en un tercer país. Y la Cancillería también tuvo participación en el plano diplomático de la tramitación del pedido de extradición a Gran Bretaña –luego rechazado– del ex embajador iraní en Buenos Aires, Hadi Soleimanpour.
Al cabo de la reunión que mantuvo con Canicoba Corral en tribunales, Bielsa le sugirió que ponga en práctica la propuesta de Memoria Activa para que sea un grupo de fiscales el que instruya el expediente. La idea de esa agrupación –la misma que promovió la recusación contra Galeano que derivó en su apartamiento de la causa– es que ese cuerpo sea liderado por el fiscal Alberto Nisman, uno de los representantes del ministerio público que investiga el caso desde hace nueve años junto con Eamon Mullen y Miguel Angel Romero.
En Memoria Activa consideran que es mejor que sean los fiscales quienes lleven adelante la investigación y que Canicoba Corral actúe como una suerte de juez de garantías. De ese modo, el magistrado podría preservar mejor su figura y al mismo tiempo sería menos complicado el traspaso del expediente a sus manos dado que los fiscales ya vienen trabajando desde hace tiempo en el caso.
Aunque en la Cancillería no quisieron dar mayores precisiones de la visita de Bielsa a Canicoba Corral, en los tribunales de Comodoro Py trascendió que tanto el funcionario como el magistrado consideraron que el encuentro entre ambos había sido positivo. Fuentes judiciales confiaron que el juez “tomó nota de la sugerencia del canciller y se mostró muy receptivo frente a la propuesta”. Aquellos que han conversado del asunto con Canicoba Corral especulan que si finalmente decide delegar la investigación en manos de los fiscales, recién firmará la resolución correspondiente una vez que termine el juicio oral y público contra la “conexión local” del atentado, lo cual está previsto para marzo próximo.