“Aquí están las canas del temor, las canas de la alegría, las piernas cansadas de marchar por Avenida de Mayo, por Granada, por El Salvador, y a acá estamos nosotros, hijos del pueblo, ambos comunistas: hoy la alegría es también revolucionaria.” En uno de los momentos más emotivos del acto por los 86 años del Partido Comunista de la Argentina, Zaida Chmaruk, una integrante de la Federación Juvenil Comunista (Fede), pronunció esas palabras mirando hacia los 200 veteranos camaradas que llenaban ayer el teatro Bambalinas en pleno barrio de San Telmo.
La ceremonia comenzó cuando empezaba a caer la tarde y la vieja guardia del comunismo nacional fue uno de sus protagonistas centrales. Pero la emotividad propia del aniversario y el homenaje se mezclaba con la necesidad de los presentes de expresar su bronca por las declaraciones del subsecretario de Estado norteamericano, Roger Noriega, sobre la relación de la Argentino y Cuba. “Ahora más que nunca gritamos nuestro apoyo al pueblo cubano”, se escuchó en reiteradas oportunidades.
A medida que los veteranos llegaban al teatro, los jóvenes militantes del PC les entregaban pergaminos simbólicos en reconocimiento a sus años de lucha. Entre los homenajeados se encontraba Francisco Formento, que se inició en el comunismo durante la Guerra Civil Española, y hoy, a los 84 años, es el presidente de la Mesa Coordinadora de Jubilados del partido. “Yo estoy seguro de que los jóvenes van a continuar construyendo un frente opositor a un imperialismo que se ve acorralado, como evidencian las declaraciones de Noriega que habla por Bush”, comentó Formento a Página/12. “Nosotros no somos ni viejos ni pasivos y también vamos a seguir marchando con ellos”, aclaró.
Hubo momentos emotivos como cuando Chmaruk pronunció sus palabras junto a Gimena Sakin, otra de las muchas integrantes de la Fede presentes en la ceremonia, en la que también estuvieron la diputada de Izquierda Unida, Patricia Walsh, y el ex legislador de Piquete Solidario, Alexis Latendorf. Y hubo también espacio para la coyuntura, como cuando subió al escenario el secretario general del partido, el ex diputado Patricio Echegaray.
“No hay que dejar enfriar estas declaraciones, es el momento para apoyar a Cuba, a Fidel, y al pueblo cubano que es el último bastión contra este sistema que hambrea a cientos de millones en el mundo”, expresó sobre el final Echegaray, y los aplausos cubrieron la sala.
Informe: Alfredo Ves Losada