Por F. Y.

La distribución de las comisiones parlamentarias en el bloque de diputados del PJ no es una tarea fácil. El armado no sólo se realiza teniendo en cuenta la cantidad de sectores internos, y el peso de cada uno. Además entran en juego las disputas políticas. Por caso, ayer el kirchnerismo logró desplazar al riojano Adrián Menem de la Comisión de Industria. El que todavía pelea, aunque contra las cuerdas, es el ex canciller Carlos Ruckauf quien continúa presionando por la presidencia de Relaciones Exteriores.
Durante la jornada de ayer, y en el mayor hermetismo, la conducción del bloque oficialista se reunió con representantes del kirchnerismo que –con el aval de la Casa de Gobierno– presionaron para que el legislador riojano no sea designado al frente de la Comisión de Industria. El sector que responde al Presidente entendía que era una contradicción –e incluso una afrenta al Gobierno– poner a “un representante del modelo neoliberal que destruyó la industria argentina” en la comisión que tiene que entender con los proyectos relacionados con este sector.
El encargado de llevar adelante la negociación fue el santacruceño Eduardo Arnold, a la sazón vicepresidente primero de la Cámara baja.
La conducción de la bancada –en manos del duhaldismo– propuso que Menem pasara a conducir la Comisión de Agricultura. Parecía que así se iba a solucionar el conflicto. Sin embargo, no previeron que la santafesina María Carmen Alarcón, propuesta para ese cargo, pusiera el grito en el cielo. La reutemista, que venía de ser desplazada de la Comisión de Mercosur, ya había comenzado a trabajar como virtual titular de Agricultura, que incluyó una reunión con el secretario del área, Miguel Campos.
Alarcón amenazó entonces con renunciar al bloque si nuevamente, era desplazada. La calma llegó recién cuando se satisfizo el reclamo de la reutemista y se movió a Menem a Economías Regionales y se designó al duhaldista Carlos Brown al frente de Industria.
Pero la disputa por las comisiones no termina todavía. Si bien la mayoría de los integrantes del bloque oficialista juran que ya no existen posibilidades de que Ruckauf se quede con Relaciones Exteriores, esto no implica que el ex canciller no continúe presionando para ocupar el puesto que le prometió Eduardo Duhalde.
Desde la Rosada ya informaron que “jamás” van a permitir que Ruckauf presida esta comisión. Sin embargo, el duhaldismo se ve en un intríngulis, ya que quien fuera gobernador de Buenos Aires cuenta con un respaldo importante. “Es difícil resolver este tema. La casilla de Relaciones Exteriores todavía continúa vacía”, reconoció una de las autoridades del cuerpo. Continuará.