EL PAíS
› LA CRISIS EN LA SEGURIDAD: BLUMBERG DIFUNDIO UNA CARTA TOMANDO DISTANCIA DE RUCKAUF
“Yo no conocía sus antecedentes”
El padre de Axel negó “rotundamente” cualquier identidad política con el ex gobernador de la mano dura y su ex ministro e ideólogo. Explicó que confió en Casanovas por ser “un ciudadano común” y no saber manejarse en un “ámbito con tantos intereses”.
El padre del asesinado estudiante Axel Blumberg difundió ayer una carta tomando distancia de ciertas líneas de “mano dura” que quedaron asociadas en los últimos días a su “cruzada”. Juan Carlos Blumberg aclaró ayer por escrito que al ver que “se asociaba la cruzada” con “proyectos e ideas del ex gobernador de la provincia de Buenos Aires, Carlos Ruckauf, y a su ex ministro de Justicia, Jorge Casanovas”, quiso “negar rotundamente” y aclarar que no los sigue políticamente. Blumberg explicó que apareció públicamente con Casanovas porque le pareció “una persona sumamente inteligente e informada”. Y justificó su aparente validación de uno de los ideólogos de la mano dura diciendo que “no me tomé el tiempo necesario para averiguar qué antecedentes tenía ni a qué político respondía”.
El texto completo de la carta de Blumberg dice: “En los últimos días tuve oportunidad de leer en diversos diarios que se asociaba la cruzada que estoy impulsando a los proyectos y las ideas del ex gobernador de la provincia de Buenos Aires Carlos Ruckauf, y a su ex ministro de Justicia, Jorge Casanovas. Quiero negar rotundamente esto y hacer una aclaración. El domingo 4 de abril solicité al Dr. Casanovas que me acompañara al programa de televisión de Mariano Grondona porque, cuando lo conocí en la reunión de la Legislación Penal, me pareció una persona sumamente inteligente e informada, y con vastos conocimientos en el área del derecho penal. Debido a la velocidad con la que mis días avanzan desde que asesinaron a mi hijo, y el vértigo en el que me veo envuelto desde entonces, no me tomé el tiempo necesario para averiguar qué antecedentes tenía el Dr. Casanovas ni a qué político respondía. Este fue mi error, del que me hago cargo totalmente, aunque quiero recordarles que hasta que un grupo de delincuentes asesinó a mi hijo Axel yo era un ciudadano común, sin contactos con la política, y por eso recién estoy aprendiendo a manejarme en un ámbito con tantos intereses contrapuestos”.
“Los que están a mi lado en estos días de tristeza y de lucha son los amigos de Axel, sus compañeros de la Goethe Schule y del I.T.B.A. y sus padres. Son quienes me ayudan no solamente a juntar firmas para impulsar mi petitorio sino también a contestar y guardar cada carta, cada mensaje, cada pedido, de los muchos que afortunadamente recibo de quienes se identifican con nuestra propuesta. Ellos son mi sostén; no tengo asesores ni consejeros políticos de ninguna clase.”
“Quiero recordar, entonces: lo que busco con la ‘Cruzada Axel por la vida de nuestros hijos’ es Justicia, no venganza ni mano dura. Ni en los momentos de más profundo dolor deseé la implementación de la pena de muerte, porque creo que el único que puede quitar la vida a un ser humano es Dios.”
“Quiero a los delincuentes en la cárcel, trabajando para pagar sus deudas con la sociedad, pero también quiero que tengan la oportunidad de recuperar su dignidad y volver a ser hombres de bien.”
“No tengo compromisos con ningún partido político ni con ninguno de sus representantes. Mi único compromiso es con mi hijo Axel y con la promesa que le hice en su tumba: luchar para que ningún otro joven argentino tenga que sufrir lo que sufrió él.”
Con su carta, Blumberg busca desmentir las versiones que lo daban como “asesorado” políticamente por Casanovas y, por lo tanto, en línea con la política de mano dura y gatillo fácil que impulsó como ministro de Carlos Ruckauf. Como jurista, Casanovas llevó adelante la argumentación y fundamentación del endurecimiento de las leyes que elevó las penas, terminó con el dos por uno y limitó las excarcelaciones.
Paradójicamente, Casanovas fue uno de los jueces del Plenario 3 de la Cámara Nacional de Casación Penal que dictó en agosto de 1995 un fallo seminal para la aplicación generalizada del dos por uno en la Justicia argentina. De hecho, ese fallo fue el que extendió ese beneficio incluso a los procesados, uno de los argumentos más fuertes para su derogación añosdespués. Como ministro de Ruckauf, Casanovas tuvo una rápida conversión del “garantismo” a la mano dura y contribuyó de forma muy destacada a eliminar el dos por uno que él había hecho posible.
Desde Francia, el ex presidente Eduardo Duhalde terció en la discusión sobre seguridad, tocando el tema del pedido de 900 millones de pesos extra del gobernador bonaerense Felipe Solá. Duhalde dijo que ya que la “cuestión fiscal ha mejorado en la Argentina y ahora se está debatiendo el tema de la coparticipación”, a la “provincia le corresponde un ingreso mayor y (la cuestión del reclamo) creo que se va a ir solucionando de esa manera”. Duhalde reiteró su apoyo al nombramiento de León Arslanian como ministro de Seguridad, el mismo puesto que ocupó cuando él gobernaba.