En línea con la reconstrucción que lleva adelante en el Poder Judicial de Santiago del Estero, el interventor Pablo Lanu-sse anunció la destitución de 22 magistrados y fiscales, entre los que se encuentran María del Carmen Bravo, la jueza que estaba al frente de la causa por el doble crimen de La Dársena. La decisión fue comunicada anoche, cuando aún sonaban las repercusiones por la designación de 23 jueces que cubrirán las vacantes que se generaron desde el inicio de la intervención federal.
Aunque estas nuevas destituciones se conocieron recién a última hora, durante toda la jornada se esperaba algún tipo de anuncio en el área judicial, porque el propio Lanusse había deslizado la posibilidad de “novedades relacionadas con este proceso de renovación”.
“Se ha evaluado la situación y los antecedentes de los magistrados y fiscales, y este análisis me ha llevado al convencimiento de la necesidad de estas remociones”, anunció en conferencia el ex fiscal. Fuentes de la intervención aseguraron a Página/12 que la nueva medida producirá vacantes en la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial, Cámara de Apelaciones en Trabajo, juzgados en lo Civil y Comercial, juzgados de Paz Letrados, Fiscalías de Cámaras, y Defensorías de Menores, Pobres y Ausentes e Incapaces en la Capital, y en dependencias de La Banda, Añatuya y Frías.
Pero sin dudas la destitución más importantes fue la del Juzgado de Instrucción en lo Criminal y Correccional de La Banda donde se desempeñaba María del Carmen Bravo, a cargo de la investigación por el asesinato de Leyla Nazar y Patricia Villalba. Pero no fue la única novedad en la causa por el doble crimen. Lanusse anunció la creación de un fondo de recompensas para quienes aporten datos “fehacientes y verificables” sobre el caso que marcó el principio del fin para el poder juarista.
Informe: Alfredo Ves Losada.