El gobierno porteño trasladará parte de sus oficinas a la zona sur. Es que acaba de comprar un edificio de seis pisos, en el barrio de Barracas, que perteneció a la empresa textil Alpargatas, y hasta allí se mudarán, en tres meses, todos los organismos que dependen de la Secretaría de Justicia y Seguridad Urbana de la ciudad, y que hasta ahora están dispersos en siete edificios. La mudanza, dicen en el gobierno porteño, producirá un ahorro de recursos, ya que algunos de los lugares que se utilizan en la actualidad son alquilados.
La flamante sede del gobierno porteño está en la Avenida Regimiento de Patricios 1142. Se trata de un edificio con planta baja y seis pisos, con una superficie total de 13.000 metros cuadrados (2000 de los cuales corresponden a estacionamiento), un anexo a reciclar y 1800 metros de terreno libre. Hasta allí se mudarán el secretario de Justicia y Seguridad Urbana, Juan Carlos López, y los 2485 empleados que dependen de su cartera. Las oficinas que se trasladarán hasta ese lugar son:
- Las direcciones de Habilitaciones y Permisos, y de Justicia y Registros, la Unidad Polivalente de Inspectores, la oficinas de Mediación Comunitaria y la Unidad de Auditoría Interna, que hoy funcionan en Lavalle 1429.
- La Subsecretaría de Justicia y Trabajo, ubicada en Moreno 1170.
- Las direcciones de Calidad Ambiental, y de Higiene y Seguridad Alimentaria, que ocupan un lugar insuficiente en el edificio del Banco Ciudad, en Ortiz de Ocampo y Las Heras.
- La Dirección de Fiscalización de Obras Particulares y Catastro, que hoy funciona en el Edificio del Plata, en Carlos Pellegrini 211.
- La Dirección de Custodia y Seguridad de Bienes de Gobierno, que requiere espacios específicos para depósitos.
- Por último, las oficinas del secretario López y del subsecretario de Seguridad, Enrique Carelli, que están en el edificio de la Jefatura de Gobierno, en Avenida de Mayo 525, desconectada del resto de las dependencias.
“Los dos primeros edificios son alquilados, por lo que su traslado producirá un ahorro al Estado porteño de unos 650.000 pesos anuales”, dijo a Página/12 la secretaria de Hacienda porteña, Marta Albamonte, quien participó directamente en la negociación. “Esto tiene un efecto multiplicador –agregó–, ya que a esa suma habrá que agregar lo que se ahorre por nuevos traslados desde oficinas que hoy se alquilan a las que queden desocupadas por la mudanza.”
Para el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, la compra del inmueble y el traslado de un organismo de su gobierno a Barracas “demuestra la voluntad del Estado para desarrollar la zona sur” de la ciudad. Es que, según su opinión, en ese barrio comenzará a funcionar un organismo donde trabajan cerca de 2500 empleados y que será un importante centro de atención al público, representará cuanto menos un beneficio para los comercios del barrio.
Aunque a muchos no les guste cambiar las luces del centro por el paisaje de Barracas, desde el gobierno se aclaró que el lugar cuenta con buen acceso al transporte público.
Antes de adquirir el Edificio Alpargatas, el Gobierno de la Ciudad analizó otras opciones: los edificios del diario Crónica y de Diario Popular, uno de Metrogas y otro ubicado en Chile 80. Pero al final optó por el de la avenida Patricios. La propiedad, en manos del Grupo Bapro, estaba tasada en 12,3 millones de pesos por el Banco Ciudad. Pero la compra se hizo finalmente en 8,7 millones. “No requiere de grandes obras de refacción, ya que fue reciclado hace unos diez años para el funcionamiento de oficinas y se encuentra en buen estado. Sólo hay que hacer una revisión de la instalación eléctrica y el tendido del cableado para las computadoras”, explicó Albamonte.