Los ex directores del PAMI Domingo Petrecca y Reynaldo Hermoso estuvieron a un tris de cobrar cada uno algo más de 34.000 pesos. Los ex funcionarios exigían el reintegro de salarios atrasados y, sobre todo, el reintegro del 13 por ciento que los trabajadores del instituto recuperaron. Estaba todo listo para hacerse efectivo el pago. Sin embargo, los abogados del PAMI encontraron la forma de evitarlo. Recurrieron a la Justicia solicitando que el dinero reclamado se incorpore al embargo que pesa sobre cada uno de 900.000 pesos por el manejo fraudulento de fondos del PAMI que debían entregarse a los inundados de Santa Fe y que jamás llegaron a destino. “Es poco, pero estamos recuperando los dineros que fueron saqueados del PAMI”, aseguró a Página/12 la directora normalizadora Graciela Ocaña.
El reclamo de los ex funcionarios que había designado en su momento la CGT de Rodolfo Daer cuando se había normalizado el PAMI, recorrió los intrincados despachos del edificio central de la mayor obra social del país. Así, y fruto de la burocracia de la institución, estaban a punto de pasar por ventanilla a cobrar. La forma que encontraron las nuevas autoridades para frenar el desembolso fue presentarse ante el juzgado de Claudio Bonadío. Los abogados del PAMI dieron cuenta de que tanto Petrecca como Hermoso tienen embargos de casi un millón de pesos por la causa que se abrió luego de que una auditoría demostrara que los ex funcionarios no rindieron cuentas del instituto. Por tal motivo, solicitaron al juez que este dinero se incorpore a ese embargo. Bonadío dio el acuerdo.

Un par

Hermoso, que junto a Petrecca responden al gastronómico y archienemigo de Kirchner, Luis Barrionuevo, tiene todavía que responder a lo que en el PAMI se conoce como los Fondos Rotarios. Estos estaban destinados para los inundados de Santa Fe. Hermoso había firmado en mayo del año pasado una resolución para asistir a los damnificados en 650 mil pesos. La comisión económico-financiera del directorio le entregó la mayor parte de esa suma en efectivo. Con el dinero en la mano, el sindicalista le pagó 156.331 pesos a la empresa Balkash. Le dio 404.078 a Autoservicio Mayorista Diarco. Y le entregó 26.450 a Transporte Frate. Sin embargo, la Auditoría General de la Nación determinó en su momento que “no existe cifra cierta de la cantidad de afiliados damnificados”. Además, informó que “no todas las resoluciones fueron convalidadas por el directorio” y que “no se ha podido constatar que el directorio haya autorizado el retiro del dinero en efectivo al señor Reynaldo Hermoso”. Aseguró también que “no se encuentran los fundamentos para que las contrataciones y/o adquisiciones fueran canceladas mediante dinero en efectivo y no en cheque, contrariando elementales normas de control interno”. A partir de este informe, Hermoso debe responder ante la Justicia que lo tiene embargado por casi un cuarto de millón de dólares.
El escándalo del manejo de estos fondos fue prácticamente el detonante para que el entonces novel gobierno de Kirchner decidiera la intervención del PAMI. Tanto Hermoso como Petrecca intentaron resistir al negarse a abandonar sus puestos. Ni siquiera la solución de Daer de removerlos evitó que la decisión presidencial se concrete.