Mar 09.04.2002

EL PAíS

Dura represión policial a los ahorristas movilizados en la city

Contra lo que es usual dejaron entrar a los ahorristas a protestar dentro de un banco. Ahí agentes de civil y uniforme los apalearon, esposaron y llevaron.

Atrás quedaron los tiempos en que los ahorristas podían descargar su bronca contra el corralito ante la mirada de comprensión oficial. Ayer, un grupo de manifestantes que ingresó al hall del BankBoston para reclamar por la devolución de sus depósitos fue reprimido por la Policía Federal, que detuvo a cinco de ellos en medio de golpes, forcejeos y crisis de nervios de los apresados. Los incidentes se iniciaron cuando la infantería se apostó en la puerta del banco y no dejó salir a los ahorris- tas que caceroleaban adentro, mientras un segundo grupo de policías, dentro del cual había varios de civil, los presionaban para que desalojaran el lugar. Después, como era de prever, siguieron los empujones y las detenciones.
Los ahorristas fueron trasladados a la comisaría primera bajo los cargos de resistencia a la autoridad, violación a la propiedad privada y disturbios.
Los manifestantes son los mismos que todos los lunes, miércoles y viernes al mediodía recorren el microcentro porteño en protesta para que les devuelvan la totalidad de sus ahorros en dólares. Como parte de su recorrido habitual, poco antes de las tres de la tarde el grupo llegó frente al edificio del BankBoston ubicado en Florida y la avenida Roque Sáenz Peña.
“Nos dejaron entrar muy fácilmente, lo que nos llamó la atención porque últimamente todos los bancos están muy custodiados”, contó uno de los caceroleros, que pidió que su nombre no sea publicado. “Una vez que estuvimos adentro la infantería cerró las salidas haciendo un cordón humano, mientras otros policías de civil empezaron a provocar y empujar. En medio de los tironeos, a una de las mujeres la agarraron del cuello, le patearon la cabeza y le rompieron un diente”.
La televisión registró parte de los incidentes, en los que se ve a la manifestante tirada en el piso boca abajo. Un policía ya consiguió ponerle una esposa y ante la resistencia de la detenida, que intenta esconder la otra mano bajo su cuerpo, le inmoviliza el brazo con el bastón, con el que hace palanca hasta que logra cerrar la segunda esposa. La mujer grita, fuera de sí. A su lado, un jubilado boquea. Está muy pálido y se aprieta el pecho como al borde del paro cardíaco.
La mujer fue internada en el Argerich hasta la noche, mientras los otros cuatro detenidos pasaban más de seis horas en la comisaría primera, ubicada en Lavalle al 400. Los ahorristas se trasladaron hasta la seccional y manifestaron en su puerta en reclamo de su libertad, en un grupo al que más tarde se unieron integrantes de asambleas barriales de Congreso, Almagro y Parque Rivadavia.
Actuó a cargo del caso el juez Marcelo Alberó. Los detenidos fueron Rubén Barraza, Edgardo Condoleo, Gustavo Medina y su esposa, y la mujer de apellido Argelia que se ve en la grabación de la TV. Recién anoche, pasadas las 21, pudieron recuperar la libertad.

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