De la Rúa faltó a la cita en Tribunales pero apareció su ex jefe de Inteligencia, Carlos Becerra. La semana próxima es el turno de la esposa de Domingo Cavallo y de quien fuera ministra de Trabajo de la Alianza, Patricia Bullrich. Todos son testigos en la causa sobre un presunto complot que derrocó al ex presidente. Becerra debía presentarse el miércoles pero adelantó su visita al juez federal Norberto Oyarbide y reiteró la versión que De la Rúa ya había desplegado cuando fue indagado por la masacre de Plaza de Mayo. Según el último jefe aliancista de la SIDE, el 20 de diciembre hubo “grupos organizados con objetivos políticos” que habrían contribuido a la caída del gobierno. El ex ministro del Interior Ramón Mestre y el ex presidente Carlos Menem también formarán parte del desfile por esta causa –que aparece como la contracara política de la investigación sobre la represión del 20 de diciembre– aunque más adelante.
Con el mismo sigilo que rodeó la visita que el martes hizo el secretario de Seguridad, Juan José Alvarez, al fiscal Carlos Stornelli, ayer recorrió los pasillos de Comodoro Py el ex jefe de la Secretaría de Inteligencia del Estado, Carlos Becerra. Ambos acudieron por la misma causa: la investigación de Oyarbide sobre una supuesta conspiración que propició la caída de Fernando de la Rúa, a partir de la denuncia de un abogado bahiense. El magistrado dispuso ayer algunas de las citaciones a testigos que le había solicitado el fiscal Stornelli, entre ellas la de Becerra. Sucede que no conformó a los investigadores el escueto informe que hizo llegar la SIDE al juzgado. “Era meramente descriptivo, con menos detalle que el de la (Policía) Federal, y realmente esperábamos un análisis más profundo de un organismo especializado”, comentó una fuente judicial a Página/12.
Ayer, Oyarbide tuvo oportunidad de hacerle a Becerra varias preguntas al respecto. “Fue un poco más allá pero no demasiado”, indicó la fuente. El ex funcionario ofreció al juez la descripción de la situación que tuvieron desde adentro de la Casa Rosada y fue entonces que aportó la misma conclusión que De la Rúa sobre la participación de organizaciones que actuaron con fines políticos, aunque no identificó a qué sector pertenecían. Algo muy similar a lo que escribió el ex presidente para presentar ante la jueza María Servini de Cubría cuando fue llamado a indagatoria en la causa sobre la represión desatada el último día de su mandato. Sin embargo, el ex mandatario mencionó como responsables de la conspiración a sectores del justicialismo y destacó que le faltó el respaldo de la propia Alianza. Si bien no fue acusado por los cinco homicidios sino por 29 detenciones ilegales realizadas en el marco del estado de sitio, De la Rúa se defendió mostrándose como víctima de una confabulación para sacarlo del poder. Según pudo reconstruir este diario, en realidad Becerra ayer mencionó la presencia activa de “grupos organizados y desorganizados, con y sin objetivos políticos”.
“No está esquivando la citación ni preparara una reivindicación política”, aclaró a Página/12 el abogado Miguel Almeyra, defensor de De la Rúa. Había sido convocado para las para las 11, pero una hora y media antes los abogados Zenón Ceballos y Almeyra se presentaron en el juzgado para anunciar que “insuperables inconvenientes personales” le impedían a su cliente abandonar la quinta en Villa Rosa. Stornelli pidió de inmediato a Oyarbide que fije nueva fecha para el interrogatorio, bajo apercibimiento de ser llevado a Tribunales por la fuerza pública en caso de una nueva inasistencia. El ex presidente fue convocado para el lunes 15 a las 10. “Lo citaron como testigo de manera sorpresiva y a un ex presidente hay que trasladarlo con cuidado, y él, por ejemplo, no quiere llegar en helicóptero”, explicó Almeyra. El defensor anticipó que el ex presidente no dará más detalles ante Oyarbide que los aportados a Servini.
Sonia Abrazian de Cavallo debe prestar declaración testimonial el martes para explicar por qué aseguró en televisión que el 20 de diciembre hubo ungolpe de Estado, y con qué elementos contó para acusar a “dirigentes de la provincia de Buenos Aires” de haber impulsado un estallido social. El jueves 18, en tanto, será interrogada Bullrich.