EL PAíS
› OPINION
Algunas preguntas
› Por Eduardo Aliverti
Los días políticos que transcurren son eclécticos. No sobresale ningún tema en particular sino varios en general, que a su vez aparecen y desaparecen de modo aparentemente disperso. Junto con otros que van quedando eliminados de la agenda mediática hasta que –inevitable– en cierto momento resurgen, para sorpresa de olvidadizos varios de diferente naturaleza. Veamos algunos de estos asuntos, sin necesidad de ensayar una respuesta. O sí.
León Arslanian echó a otros 128 oficiales de la mafia policial bonaerense, impugnados por diferentes delitos. Juego clandestino, droga, torturas, extorsión, robos. Ya van casi 800 exonerados desde que asumió y no sólo se supone que está muy bien por estrictas razones de legalidad. Es una muestra de autoridad y un soplo de aire fresco. Pero, ¿puede ser que nunca contesten quiénes y cómo hacen el seguimiento de cuál es el destino de esos policías, si es que hay quienes los sigan? ¿Dónde van a parar?
La inmensa mayoría de la prensa ha visto como medio lleno al vaso del aumento a los jubilados, lo cual tiene su sentido porque es uno de los sectores más postergados y porque ya eran años y años de congelamiento. No suena sensato manifestarse contrario a una reparación después de tanto tiempo. Pero, ¿será posible que casi nadie se anime a verlo también medio vacío, siendo que al fin y al cabo estamos hablando de un mínimo de alrededor de 400 pesos? Un grupo especial de 150 hombres de la Policía Federal, Policía Bonaerense, Gendarmería y Prefectura inundaron ya la zona norte del conurbano, con epicentro en San Isidro, para prevenir y reprimir secuestros e inseguridad en general. ¿Inundarían González Catán? ¿Merlo? ¿Gerli? ¿Moreno? ¿Florencio Varela? Quienes dicen que la inseguridad frena las inversiones, ¿no deberían dar algún dato, uno solo aunque más no fuere, de cuáles son las inversiones que se frenan? Los sectores de clase media embroncados contra los piqueteros, ¿no piensan por un segundo que esa gente en otras circunstancias hubiera ido por los fierros, y hoy sólo cortan las calles con cronogramas de aviso? A propósito. ¿Seguro que los piqueteros perjudican al sistema? ¿Qué pasaría si hubiese reactivación fabril y entraran en programas de capacitación, y se agremiasen, y su lucha no fuera con prioridad por la sobrevivencia? ¿Seguro que al sistema no le conviene más la dispersión, la desesperación y los planes de ayuda?
Los diputados nacionales se acordaron un aumento de 1200 pesos, bajo el mecanismo de seis pasajes aéreos canjeables por efectivo. No caen bien, ni el incremento ni el método. Y nuevamente la discusión sobre los privilegios de la “clase política”. ¿El debate es ése? ¿No debiera ser cuál es la calidad de esa dirigencia? ¿Preocuparía cuánto ganan los parlamentarios si fueran eficientes en su labor de cara a los intereses de las mayorías? Y de yapa, ¿se puede meter a todos en la misma bolsa? Los que se preguntan por qué Kirchner recibe a Maradona, ¿se preguntan por qué Kirchner lo atiende a Blumberg cada vez que lo llama? A propósito. Ahora que el instrumento Blumberg convoca a una marcha contra el nombramiento de María del Carmen Falbo como procuradora general de la Suprema Corte bonaerense, ¿dirán los medios que es una marcha con “intenciones políticas”? Los casos de secuestros resonantes reintrodujeron la cuestión de la inseguridad. Pero no se reintrodujo la relación mafia policialdelito-intendencias del conurbano bonaerense. ¿Por qué? Los que se responden que la economía argentina no tiene acechanzas a la vista porque si baja la soja suben las retenciones petroleras y si bajaran las retenciones petroleras la soga igual tiene resto, ¿se preguntan qué ocurrirá más o menos desde abril del año que viene, cuando empiecen a precipitarse los vencimientos de pago con los acreedores externos? Si se piensa que incorporar al básico de convenio los 50 pesos no remunerativos vigentes desde enero de este año “recalentará” la economía, ¿si el ajuste salarial se amplía a todos los trabajadores la economía llegaría al orgasmo? A algunos periodistas que se preguntan quién les paga el viaje a los que van a Caracas, o de qué viven ciertos protagonistas de la protesta social, ¿no habría que preguntarles cómo hacen para trabajar de periodistas y vivir en mansiones de millones de dólares en countries amurallados? Los detenidos por los incidentes en la Legislatura porteña, ¿por qué siguen detenidos si no tuvieron nada que ver?
Las esposas de los ricos de la provincia de Buenos Aires, a quienes el Estado notificará que sus maridos no pagan los impuestos, ¿se conmoverán?