La titular del radicalismo bonaerense, Margarita Stolbizer, fue la encargada de cerrar ayer el congreso provincial con el que el castigado partido buscó reanimarse de cara a las elecciones del año que viene. Lanzada como candidata, Stolbizer aprovechó la ocasión para cuestionar a un grupo de intendentes que coquetean con alejarse de la UCR. “Son los que buscan defender posiciones de poder propias abdicando de las ideas”, explicó.
“Es un congreso de la militancia que busca recuperar la ética y la disciplina, los principios que guiaron a la UCR, para religitimarla frente a la sociedad tras la traición a las ideas del gobierno de Fernando de la Rúa”, explicó la diputada. Ayer, en Mar del Plata, el sector mayoritario del radicalismo bonaerense, liderado por Federico Storani y Leopoldo Moreau, se reunió con el objetivo de buscar alguna estrategia que le permita potenciar sus candidaturas para las legislativas del año que viene. Además del peronismo, que aparece como seguro ganador, la UCR, con Stolbizer a la cabeza, deberá enfrentar a Ricardo López Murphy y al ARI, que candidatea a Marta Maffei.
Pero el congreso estuvo dominado por un segundo tema. Radicales al fin, los dirigentes que se acercaron a Mar del Plata no dejaron pasar la oportunidad para cuestionar al grupo rebelde. “Pensamos que la ruptura podría llegar a ocurrir, pero por parte de sectores minoritarios que se quieren autoexcluir”, explicó la diputada. Se refería al núcleo integrado por una veintena de intendentes y algunos legisladores y concejales que se reunieron hace dos meses en Olavarría para plantear sus discrepancias con la conducción oficial. El grupo estaba integrado, entre otros, por Gustavo Posse, de San Isidro, y Enrique “El Japonés” García, de Vicente López, quienes reclamaron una mayor apertura partidaria, que derive en eventuales alianzas con López Murphy o Elisa Carrió.
“Estamos de acuerdo con muchas cosas que plantea Elisa Carrió, pero ella se autoexcluyó del radicalismo. Queremos construir alianzas, pero coherentes con las ideas de nuestro partido y para eso primero tenemos que fortalecer nuestras bases doctrinarias”, señaló Stolbizer. “La presidenta del partido no puede hablar así. Yo no estoy de acuerdo en que se hable de división sino que habría que referirse a la dispersión, porque muchos afiliados de la UCR votaron por otros partidos”, le respondió Juan Manuel Casella, el único integrante del sector rebelde que se acercó al congreso de Mar del Plata.