La causa Agustín Feced, el voluminoso expediente que concentra la mayoría de los crímenes cometidos durante la dictadura militar en Rosario, podría salir en los próximos días de un silencio de más de quince años. A partir de un pedido de ex detenidos desaparecidos, familiares de víctimas y organismos de derechos humanos, el juez federal Omar Digerónimo ya tiene definida la reapertura de esta investigación, que quedó archivada con las leyes del perdón. La reactivación de la instrucción llegará acompañada por las órdenes de detención de varios imputados que deberán enfrentar la misma situación procesal que en 1987.
Esta causa abarca el grueso de los secuestros, detenciones y torturas cometidos en la órbita del Segundo Cuerpo de Ejército, que comandaba el represor Leopoldo Galtieri. Y su reapertura es uno de los reclamos más sostenidos por organizaciones defensoras de los derechos humanos y familiares de las víctimas de la represión en Rosario. Según se supo, el juez Digerónimo ya tomó la decisión, que sería dispuesta en los próximos días.
El pedido ante Digerónimo fue presentado por Ramón Verón y Juan Antonio Rivero, dos sobrevivientes del centro clandestino conocido como Fábrica de Armas, y familiares del militante Daniel Gorosito, desaparecido en 1976. La reapertura de la instrucción significará, al mismo tiempo, la reanudación de otros expedientes acumulados y la cárcel para varios imputados que regresarían a la situación procesal que tenían cuando se sancionó la Ley de Punto Final. El pedido cuenta con el apoyo del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas y Gremiales, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo 25 de Mayo, HIJOS y la dirección del Museo de la Memoria rosarino.
La causa Feced lleva el nombre del represor fallecido que estuvo a cargo de la policía local en la dictadura y que cuando se produjo el golpe militar en 1976 sentenció: “A los subversivos les damos 48 horas para que abandonen Rosario o los acompañaremos al cementerio”.