“Vamos por más unidad.” Con esta frase, el documento emitido al cierre del XXIII Congreso del Partido Comunista dejó sellado el compromiso partidario de “trabajar activamente” para fortalecer el espacio unitario ideado por sectores de izquierda y centroizquierda durante el encuentro que se desarrolló la semana pasada en Rosario. Luego de tres días de debates entre más de 300 delegados, el PC resolvió avanzar hacia “la construcción de una nueva fuerza alternativa junto a otras fuerzas políticas, sociales, cooperativas y de la mediana empresa”.
Una semana después del encuentro que reunió a más de 700 referentes políticos y sociales de la centroizquierda en Rosario, el PC trabajó puertas adentro en Buenos Aires sobre las conclusiones de esa reunión. El resultado, luego de 72 horas de discusiones abiertas y en comisión, fue un rotundo respaldo a la iniciativa de conformar de un movimiento político que intente agrupar a las fuerzas de ese espectro.
“Vamos a construir una nueva fuerza frentista que tiene que nacer en la Argentina, como el espacio que se abrió en Rosario. Esa ha sido nuestra línea política y hoy vemos con esperanzas que empieza a fructificar”, aseguró el secretario general del PC, Patricio Echegaray. El líder del partido destacó la necesidad de que las expectativas generadas por el encuentro rosarino no queden en el plano testimonial. “Debemos desarrollar un nuevo movimiento histórico, con un enfoque de izquierda amplio, plural, diverso, y que aspire a producir cambios en la estructura del poder político en la Argentina”, dijo.
El Congreso del PC se desarrolló en el Hotel Bauen, una empresa que fue recuperada por sus trabajadores. Los pasillos y salones del edificio ubicado en Callao al 300 funcionaron durante los tres días del encuentro como escenarios de debates sobre cuál debe ser el rol de la izquierda en el presente político de la Argentina, y también de la región. Además de los 350 delegados de todo el país, participaron más de veinte referentes internacionales, como la senadora electa por el Frente Amplio de Uruguay, Marina Arismendi, y el líder del Partido Comunista Alemán, Günter Phol, quienes participaron en los debates.
“El reto de la izquierda en Latinoamérica, frente al panorama positivo que se presenta con varios países en manos de gobiernos de centroizquierda, no es tener grandes programas o ambiciones en la cabeza, sino pararse frente a la realidad actual de las sociedades y comprender, de una manera muy meridiana, que apenas estamos en el comienzo de algo que puede marcar un giro definitivo en la región”, dijo a Página/12 el delegado del PC de Colombia, Alfredo Holguín, uno de los invitados latinoamericanos.
En el encuentro, que finalizó ayer por la noche, el PC ratificó además su coalición política con la Izquierda Unida y anunció que realizará un acto conjunto el 11 de diciembre en Plaza de Mayo, en el que la diputada del MST, Vilma Ripoll, hará el traspaso de la banca que ocupa en la Legislatura porteña al secretario del PC en la Capital, Marcos Wollman.

Informe: Alfredo Ves Losada.