EL PAíS
› A LA ESPERA DE LA OFERTA SALARIAL
El paro docente
Los docentes bonaerenses terminaron ayer el paro de cuarenta y ocho horas con la misma advertencia que vienen realizando desde que se desató el conflicto que mantienen con el gobierno provincial: que el próximo ciclo lectivo no va a comenzar en forma normal, en tanto no haya una propuesta salarial concreta y acorde con lo que peticionan. Por el momento, las autoridades no dieron precisiones sobre el ofrecimiento que harán para que no haya ningún docente por debajo de la línea de pobreza y en la Dirección General de Escuelas dicen que recién entre mañana y pasado será transmitido al Frente Gremial.
El cierre del último paro docente del año en la provincia de Buenos Aires estuvo teñido por la polémica derivada de la decisión del Frente Gremial de no acatar la conciliación obligatoria que dispusieron las autoridades para congelar un conflicto, que al cabo del presente ciclo lectivo, ocasionó la pérdida de dieciséis días de clase.
El ministro de Trabajo provincial, Roberto Mouillerón, reiteró que se va a castigar a los maestros que realizaron la huelga y que se aplicarán sanciones económicas a la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) y el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación (Suteba). “La cartera laboral desconoce que hay un fallo de la Corte Suprema de la Nación que no permite tomar a la educación como un servicio básico para coartar la libertad de huelga”, retrucó el secretario general del Suteba, Roberto Baradell.
La huelga tuvo altos niveles de adhesión. Según el Frente Gremial el acatamiento fue “superior al 97 por ciento”. Los docentes aseguraron, de todos modos, que más allá del paro se “garantizaron todas las acciones de fin de curso para que los chicos puedan terminar el año”.
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