EL PAíS
› DUHALDE HABLO SOBRE LA SITUACION DE IBARRA POR LA TRAGEDIA DE ONCE
“Debe asumir su responsabilidad”
Un día después de la asunción en la ciudad de uno de preferidos, Juan José Alvarez, el ex presidente Eduardo Duhalde salió a hablar del incendio de República Cromañón. También se refirió a la situación que atraviesa el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra. Sobre Ibarra, dijo que “no debería renunciar”, pero sí “asumir sus responsabilidades”. Aunque el pedido de interpelación fracasó por tres votos, para Duhalde el jefe de Gobierno igualmente debería dar “explicaciones” ante los legisladores. Además, el ex presidente aseguró que la responsabilidad por el incendio debían cargarse “en primer lugar” sobre el dueño de la discoteca; “después, en los que tenían que controlar” y, finalmente, sobre “el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, por supuesto”.
Las declaraciones de Duhalde coincidieron con otros dichos de su esposa, Chiche, quien también se despachó contra el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá (ver página 19). Desde el entorno más cercano a Duhalde se preocuparon porque los dichos del ex presidente no se interpretaran como una muestra de excesiva dureza con el jefe de Gobierno porteño. Un colaborador de Duhalde se comunicó con Página/12 para asegurar que las críticas a Ibarra debían entenderse en el marco de la “cadena de responsabilidades”.
“En hechos de este tipo, hay una gradualidad en la cadena de responsabilidades. En un municipio de 300 empleados, la responsabilidad del intendente es más directa. En cambio, donde hay cien mil agentes públicos, como la ciudad de Buenos Aires, hay una cadena de responsabilidades. No es tan directa la cosa”, aseguró un asesor muy allegado a Duhalde. Unas horas antes, en diálogo con Radio Mitre, Duhalde había mostrado distancia con respecto a Ibarra. “A mí me parece que no”, respondió cuando le preguntaron por una eventual renuncia. “Tiene que hacerse cargo de sus responsabilidades. Es muy fácil renunciar, a veces, para sacarse un problema de encima”, dijo.
Duhalde se deshizo en elogios con uno de sus hijos dilectos: Juanjo Alvarez, el nuevo secretario de Seguridad porteña. Y confirmó que antes de nombrarlo le preguntaron qué opinaba. “En realidad sí, me preguntaron y yo, por supuesto, lo que dije de él es lo que pienso. Es un hombre que ha tenido una actividad, tanto en la Secretaría de Seguridad como en el Ministerio de Justicia de la Nación, como ministro, y fue realmente brillante. Es un hombre muy, muy capaz”, dijo. Luego, defendió a Alvarez del cuestionamiento más fuerte contra el ex intendente de Hurlingham: los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki. En ese momento, Alvarez era ministro de Seguridad de la Nación. “No tuvo nada que ver”, lo defendió. Los familiares y compañeros de las víctimas consideran a Duhalde el máximo responsable político de esas muertes.
Al igual que su esposo, Chiche habló de la tragedia de la discoteca de Once. La diputada cuestionó en forma indirecta la decisión inicial del presidente Néstor Kirchner de permanecer en El Calafate. Dijo que ella, personalmente, hubiera ido al boliche no bien se desató el incendio porque su costumbre, aseguró, es “poner el cuerpo”. “Hubiera estado al lado de la gente”, aseveró. A diferencia de Chiche, el ex presidente se mantuvo cauto al opinar sobre la reacción oficial tras el drama. Dijo que no sabía qué actitud hubiera tomado de estar en el lugar de Kirchner. Y sobre el santacruceño, destacó que “envió inmediatamente a los funcionarios que correspondía y estuvo en conexión permanente con el jefe de Gobierno”.
En relación con el reclamo de los familiares y amigos de las víctimas, Duhalde reconoció que “es natural” que pidan la renuncia del jefe de Gobierno. Pero aunque admitió la justicia de las demandas, no está de acuerdo con que Ibarra renuncie a su cargo. “La institucionalidad tiene otros caminos que no son los de la desesperación y el enojo razonable de la gente”, aseguró. Su mujer, en tanto, incluyó en sus dichos un reclamo abierto de apoyo para Juanjo Alvarez dirigido hacia el gobierno porteño y a la misma Casa Rosada. “Tiene que contar con el apoyo absoluto del jefe de Gobierno y del gobierno nacional”, demandó.