Finalmente el justicialismo santiagueño parece estar cerca de esclarecer la incógnita. Tras el recuento provisorio que, sobre un 90 por ciento de las mesas escrutadas, anticipaba a José Figueroa como candidato a gobernador por el PJ, comenzó el escrutinio final. Si bien el Tribunal Electoral de la provincia decidió no dar a conocer los resultados parciales, las primeras proyecciones estarían confirmando la candidatura de Figueroa. Según informaron fuentes del gobierno interventor, recién hoy se definiría qué lista es la ganadora. Por su parte, el representante por el menemismo, José María Cantos, reiteró las denuncias por presuntas irregularidades en el escrutinio del domingo.
Luego de los vaivenes que en los últimos días empañaron las elecciones internas del PJ en Santiago del Estero, comenzó el escrutinio final que, según explicó a este diario el interventor del partido, Rafael González, se realiza sobre el total de las mesas. Es decir, se contabilizarán también las 702 mesas que fueron escrutadas el domingo y que anunciaron la ventaja del candidato del Movimiento Peronista Popular, José Oscar Figueroa, con un 40,7 por ciento de los votos.
Pese a que el empresario de medios y candidato por Santiago para Todos, José María Cantos, había logrado imponerse, de acuerdo con el resultado provisorio, en dos de los distritos electorales más importantes de la provincia, la capital y la ciudad de La Banda, el recuento parcial le adjudicó el 38,5 por ciento, colocándolo en segundo lugar.
El arco opositor que se enfrentará el 27 de febrero con el representante del justicialismo aparece encabezado por el Frente Cívico por Santiago que postula como candidato al intendente de la capital, el radical Gerardo Zamora. Sin embargo, el dominio histórico del PJ sobre la provincia anticipa un pronóstico complicado para el funcionario de la UCR. Tan reñida es la competencia que, a pesar de que aún no está confirmado el resultado final de la interna justicialista, las calles de la capital santiagueña ya quedaron empapeladas con los afiches de las fórmulas que encabezan Figueroa y Zamora.
En contraste con el desarrollo normal que caracterizó al comienzo del recuento definitivo, Cantos salió ayer a reiterar sus acusaciones. “Lo que debió haber sido una fiesta cívica terminó en un fraude”, sentenció el candidato y actual diputado, que el lunes denunció irregularidades en el recuento. El dirigente esta vez se concentró en el jefe de Gabinete de la intervención, Pablo Fondevilla, a quien acusó de repartir “bolsones y plata” para que optaran por Figueroa. Al mismo tiempo aseguró que llevaría la cuestión a la Justicia. Por el momento, fuentes cercanas al diputado confirmaron a este diario que hizo una presentación ante el partido y el Tribunal Electoral.
Mientras el interventor Pablo Lanusse nuevamente llamó a la cautela antes de tener los números finales, Figueroa respondió a las denuncias calificándolas de “inconsistentes” e “irrelevantes”. El candidato, en diálogo con Página/12, especuló además con la posibilidad, en caso de quedar al frente de la provincia, de convocar para su gestión a dirigentes del amplio espectro justicialista de Santiago del Estero. Esta opción no discriminaría a los representantes del juarismo, incluyendo al candidato y abogado del ex zar provincial, Francisco Cavalotti, que con el 19,2 por ciento obtenido en el recuento del domingo quedó relegado como tercera fuerza.
Frente a las intenciones de Figueroa, el entorno de Lanusse optó por el silencio. Tampoco respondieron a las declaraciones que Figueroa dio ayer a los medios, en las cuales ratificó su apoyo al proyecto político de Néstor Kirchner pero al mismo tiempo se definió como “amigo personal de Carlos Menem”, aquel padrino político que secundó durante sus nueve años en el Senado pero del cual apareció alejado en el último tiempo. Ante la paradoja planteada y sintetizando el escenario que parece definir el futuro de la provincia, Figueroa sólo respondió: “El peronismo es uno solo”.

Informe: Carolina Keve.