EL PAíS
› ENDURECEN LOS PAROS. REUNION EN TRABAJO
Hoy no habrá subtes
› Por Laura Vales
La reunión entre Metrovías y los trabajadores del subte duró seis horas, pero aseguran que la discusión, en realidad, no llevó tanto tiempo. Apenas los representantes de la firma y los delegados gremiales se sentaron en la oficina del Ministerio de Trabajo, el gerente de Recursos Humanos de Metrovías sacó de una de sus carpetas un papel y leyó la oferta: un aumento del 8 por ciento. Explicó sus condiciones y escuchó luego el rechazo de los delegados. No había mucho más que hablar, así que alguien planteó que se redactara un acta. Como suele suceder en los momentos más inoportunos, la computadora del ministerio se tildó y hubo que hacer un curso para que funcionara de nuevo. Al final, terminó llevando más tiempo imprimir el acta que lo que había insumido la discusión. Frente al ocho por ciento ofrecido por Metrovías, los delegados dijeron que era insuficiente y que insistían en reclamar un aumento del 53 por ciento.
Cuando salieron a la calle había un mar de movileros. Casi todos preguntaron si tenían noción de lo alto de ese reclamo. Uno de los delegados contestó que en el conflicto se estaba discutiendo “cuál es el techo salarial de los trabajadores” en la Argentina de hoy. Es cierto que hay gente que cobra sueldos de 300 pesos, agregó, pero “no hay por qué nivelar para abajo. Lo que estamos discutiendo es si los trabajadores tenemos derecho a cobrar salarios dignos para acceder a la educación, a la cultura, para ir al cine, para que nuestros hijos estudien lo que quieran estudiar o si esos derechos van a ser sólo para los hijos de los empresarios”.
Metrovías también dio a conocer su postura. “Llevamos una propuesta salarial que mejoró la anterior, pero los delegados no quieren ninguna alternativa”, dijo el vocero Juan Ordóñez. Consultado sobre si habrá una más alta, Ordóñez dio a entender que sería muy difícil. “Metrovías es una empresa seria, no podemos tomar compromisos con plata que no tenemos.”
Junto con el 8 por ciento de aumento, la oferta de la concesionaria incluyó una mejora en el plus por antigüedad del 0,6 por ciento. Al señalar que la propuesta mejoró, Ordóñez se refería a que la actual no absorbe los 150 pesos otorgados por decreto del gobierno nacional. Entre el dinero del decreto y el nuevo incremento que sumaban entonces en la empresa, la mejora llegaría “al 24 por ciento”.
En el cuerpo de delegados, sin embargo, realizaban un cálculo distinto. “Traducido en números, la oferta de Metrovías significa que un boletero va a obtener un aumento de 46 pesos, un guarda de 69 pesos y un conductor 102”, dijo Beto Pianelli. El delegado explicó que, en la propuesta de ayer, los aumentos se calcularán sobre los sueldos básicos. “El básico de un boletero es de 581 pesos, con lo que un 8 por ciento significa 46,05 pesos de aumento. El básico de un guarda es de 1026 pesos, lo que da 69 pesos de aumento” y así.
Metrovías planteó dos condiciones para su propuesta: una es que instalarán 75 expendedoras automáticas de boletos. Como las máquinas reemplazarán el trabajo de los boleteros, la empresa se comprometió a no despedirlos, promocionándolos a una categoría superior. Finalmente, pidió dos años de paz social.
Por la noche, los trabajadores realizaron una asamblea y anunciaron que hoy no habrá subtes. El paro de 24 horas endurece el plan de lucha iniciado la semana pasada, que consistió en huelgas progresivas de tres, cuatro y cinco horas por día.
Ayer, con dos paros de cinco horas cada uno, Metrovías volvió a intentar hacer funcionar los trenes con personal jerárquico y los delegados se tiraron a las vías para frenar su salida.
El Ministerio de Trabajo convocó a una nueva reunión para hoy a las tres de la tarde. Hasta ahora no dictó la conciliación obligatoria, con la cual el gremio debería suspender los paros. La medida es riesgosa porque puede hacer escalar aún más la situación, ya que los delegados anticiparon queno la acatarán. Ocurre que la discusión salarial se inició en noviembre del año pasado y ya se cumplieron tres conciliaciones.
Metrovías tiene una planta de 1900 personas. Sus servicios son utilizados cada día por unos 700 mil pasajeros.
El ministerio ha tenido un rol activo en el conflicto salarial. En diciembre, ante la reticencia de Metrovías a hacer una oferta, elaboró una propuesta que las partes aceptaron a regañadientes, pero gracias a la que se consiguió una tregua. Ahora las negociaciones son más tensas y un acuerdo parece mucho más difícil.
Subnotas