EL PAíS
› EL PRIMER ACTO COMO PRECANDIDATO DEL EX PRESIDENTE
La campaña empezó en Caminito
Carlos Menem lanzó su candidatura por La Rioja en una cena en La Boca. Dirigentes de segunda línea y muy pocos conocidos.
› Por Martín Piqué
Cerca de Carlos Menem son habituales las sorpresas, y también las paradojas. Ayer, ya lanzado como precandidato a senador por La Rioja, el ex presidente hizo su primer acto de campaña. Pero no fue en su provincia. Fue anoche en el barrio de La Boca, en un restaurante llamado “Caminito tango show”, donde se suelen organizar cenas y bailes al ritmo del dos por cuatro. El escenario porteño, sin embargo, sirvió como plataforma para un acto especialmente bonaerense. Organizado por el dirigente de Lanús, Roberto “Roby” Fernández, el encuentro permitió a los organizadores escuchar de nuevo a Menem –quien fue recibido con una devoción inalterable– y presentar el “Frente Menemista de la provincia de Buenos Aires”, una alianza con sectores afines a Adolfo Rodríguez Saá que, por ahora, excluye al ex comisario Luis Patti.
Con la zona liberada por la acción conjunta de la policía y los custodios, Menem pudo acercarse sin ningún problema hasta el frente del restaurante. Llegó en una camioneta 4x4, sin ningún acompañante conocido, familiar o político. Cuando bajó en Del Valle Iberlucea al 1100, lo aguardaba una pequeña multitud de impacientes. Un grupo de barrio amenizaba la espera con bombos, redoblantes y banderas de murga. Bajo una lluvia de papelitos, Menem ingresó al lugar del acto. Dentro del local lo esperaba un grupo de dirigentes de segunda línea con pocos conocidos. Entre ellos sobresalía la figura del ex miembro de la Corte Suprema Adolfo Vázquez.
Rodeado por admiradores, como las madres de los actores Ricardo Darín y Adrián Suar, y también por antiguos colaboradores, Menem hizo su primer discurso ante las cámaras en mucho tiempo. Entonces confirmó su decisión de presentarse como candidato a senador por el PJ de La Rioja. “Vamos a presentar nuestras candidaturas a senador”, ratificó. Luego explicó su intención de ser senador por su provincia, en abierta contradicción con su ya conocida frase acerca del “que fue papa no puede volver a ser obispo”. “Son expresiones del momento”, se justificó con una sonrisa de siempre. De fondo se escuchaba La Yumba, de Pugliese.
El local estaba ocupado por unas quinientas personas que habían sido invitadas especialmente por Roby Fernández. Figuras no había. Estaba la dirigente porteña Silvia Majdalani, se esperaba al arquero Hugo Orlando Gatti –una presencia esperable por el escenario, a pocas cuadras de la Bombonera– y también caminaban por ahí viejos colaboradores de Menem, como su ex edecán y miembro de la SIDE Jorge Igumet. Otro ejemplo del revival seminostálgico lo aportaba Noemí Macchi, quien se presentaba como “la mucama de Menem” ante quien quisiera escucharla.
Antes de sentarse con el resto de los comensales, Menem habló ante los periodistas. Sin micrófono y con una voz apenas audible explicó por qué había decidido pelear por un cargo legislativo. “Lo hago por la necesidad que tiene el Congreso de contar con gente de experiencia. Quiero aportar mis diez años de gobierno”, aseguró. Luego desmintió que fuera a presentarse como candidato por la provincia de Buenos Aires. “Está totalmente descartado”, aseguró. Después caminó entre el gentío y se dirigió al salón principal. Allí lo esperaba la cabecera de la cena, donde habían colocado un pasacalle con el eslogan “Roby es Menem” junto a sendos cuadros de Perón y Evita.
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