Comentario
Sucedió en un cóctel del XX Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. Después del premio que le otorgó a Federico Luppi, Cristina Kirchner se plantó en el medio de la sala del Hotel Hermitage y, acompañada de Jorge Coscia, del Incaa, y Miguel Pereira, director del festival, pidió conocer a productores y directores presentes. Cuando apareció Hugo Castro Fau, productor ejecutivo de El Bonaerense y Familia rodante de Pablo Trapero, la primera dama le hizo un comentario sugerente: “Hay un libro muy bueno que estuve leyendo últimamente, Recuerdos de la muerte de Miguel Bonasso. Creo que sería una excelente película”.

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Dos argentinos a Barcelona
El miércoles las noticias pasaban por Baseotto y las valijas de Southern Winds. Por eso pocos se enteraron que Carlos Bettini se reunió en reserva con Alberto Fernández. El embajador de España está organizando para abril un encuentro del grupo del Foro Barcelona. Allí hay nombres de la talla de Paul Krugman y otros economistas que ponen en tela de juicio los consensos de Washington. El interés de Bettini es que el jefe de Gabinete, junto a Javier González Fraga, o el ministro de Economía, Roberto Lavagna, se sumen al grupo.

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Asesores clase A
Buscando clientes y exposición pública, vendrán al país Jacques Seguelá, el francés creador de las campañas de los primeros ministros Jacques Chirac y François Mitterrand; Frank Geer, asesor íntimo del ex candidato demócrata John Kerry y Chico Brandao, asesor del presidente brasileño Inácio Lula da Silva y de la ex alcalde de San Pablo Marta Suplicy. Todos coincidirán en un seminario internacional de campañas políticas que organiza Doris Capurro. Varios políticos ya se están reservando un lugar en la agenda y los encuestadores locales, que participarán del evento, afilan los números porque todo lo que digan quedará grabado.

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Previsores
Fue el acto más importante de la Agrupación Lealtad, el sello con el que el duhaldismo busca consolidar su poder en un territorio bonaerense. Pero si algún distraído creyó que la movilización a Tres de Febrero, que lideró nada más y nada menos que Chiche Duhalde, fue una afrenta a Néstor Kirchner, se equivoca. Días antes, Juan José Alvarez, el duhaldista secretario de Seguridad porteño, y después el propio Eduardo Duhalde telefonearon al jefe de Gabinete nacional, Alberto Fernández, y le contaron todos los detalles del acto para que no hubiera ningún tipo de suspicacias.

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Razones
La versión corre como reguero de pólvora en la Cancillería. Aunque hasta ahora nadie habló del tema en público. Concretamente, se dice que el ex legislador de la Ciudad de Buenos Aires, el teniente Julián Licastro, pidió una jubilación como diplomático de carrera cuando –se dice por los pasillos del Ministerio de Relaciones Exteriores– nunca lo fue. ¿Cuál sería la razón? Los que saben los montos que perciben las personas jubiladas como diplomáticos de carrera aseguran que existen 9 mil buenas razones.

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Primicia
Estaba llegando a su fin la conferencia de prensa del personal de los gremios aeronáuticos, en la que planteaban su oposición al ingreso de LanChile al mercado argentino, cuando el diputado Mario Cafiero adelantó, disculpándose, la imposibilidad de asistir a la movilización que programaban para el jueves al mediodía en el Aeroparque. En pleno anexo de la Cámara baja, el legislador les explicó a los trabajadores que debíaviajar a Iguazú por motivos laborales. Pero, rápido de reflejos, el secretario general de los aeronavegantes, Ricardo Frecia, tomó el micrófono y le preguntó:
–¿A qué hora sale tu avión?
–A las 10 –respondió Cafiero.
–No te preocupes, a esa hora no vas a viajar– le dio la primicia el sindicalista.
Ese día se pudo ver a Cafiero entre la gran cantidad de pasajeros demorados precisamente por la protesta gremial.

* Colaboró Mariano Blejman.