EL PAíS
› DIPUTADOS DISPUESTOS A DAR LA MEDIA SANCION
Para no quebrar con el FMI
› Por Eduardo Tagliaferro
Con el respaldo mayoritario de la coalición parlamentaria de peronistas y radicales, el Gobierno obtendrá hoy la media sanción de la nueva ley de quiebras. Luego de varias rondas de reuniones entre el equipo económico y los legisladores, y otras tantas consultas telefónicas a Washington, el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Legislación General coincidieron ayer mayoritariamente en un dictamen que será aprobado en el recinto. La ley también tendrá el respaldo de los miembros del interbloque federal y de los diputados que continúan alineados con el Frepaso.
Cuando se iniciaron las discusiones, la mayoría de los diputados no contaba aún con el último borrador de la norma. El hecho no impidió que los dos principales bloques coincidieran a los pocos minutos de comenzado el cónclave. La única voz disidente fue la del diputado del Frente Grande, José Vitar. “Mañana (por hoy) en tiempo record, el Congreso va a avanzar en una página de su historia que en el futuro muchos no querrán recordar”, comenzó Vitar. Para el legislador tucumano la votación de la nueva ley de quiebras quedará escrita como el día en el que “el Estado-Nación perdió su independencia jurídica, bajo la letra y música del FMI en dos partituras que se llaman: ley de quiebras y de subversión económica”.
La ley de quiebras había sido modificada en febrero de este año. Luego de su aprobación y de las insistentes críticas de los hombres del Fondo, la norma que se votará hoy da marcha atrás en algunas de esas definiciones y vuelve sobre los pasos de la anterior ley sancionada en tiempos de Domingo Cavallo. Ley a la que el radical Leopoldo Moreau no dudó en fulminar diciendo que “estaba hecha a medida de una política que tenía como objeto la extranjerización de la economía”.
Uno de los puntos centrales sobre los que el radicalismo venía insistiendo es en la preservación de la figura del craw dawn, recapitalización forzada de las empresas en quiebra. Aunque esta se encuentra contemplada en el nuevo borrador, los radicales continúan señalando que la norma debe darle prioridad al deudor para que mejore la oferta del acreedor. La propuesta del Gobierno le permite al deudor competir pero no le da a su propuesta la categoría de “preferencia”. El justicialista porteño Miguel Angel Toma coincidió en este punto con sus colegas del radicalismo y adelantó que intentará incluir esto en el debate que hoy se dará en el recinto.
El proceso en el que se discute la quiebra de una empresa le permite al acreedor quedarse con la titularidad de la firma. Sin embargo, la nueva ley tiene un apartado en el que hay un listado de excepciones. Es decir, firmas que aunque se encuentren en proceso de convocatoria, sus actuales dueños no perderían el control. El titular de la bancada de la UCR, Horacio Pernasetti, había sugerido incluir en esa nómina a las incluidas en la ley de radiodifusión. Toma fue un paso más allá y propuso incluir a todas las empresas vinculadas con “las industrias culturales”. Moreau estuvo de acuerdo con la propuesta del diputado porteño y luego de afirmar que “los medios de comunicación son fundamentales ya que está en riesgo la identidad cultural de la Nación”, dijo: “Estamos hablando de una colina estratégica para defendernos del proceso de recolonización”. Falta ver si Economía acepta la modificación. Claro, como siempre, también habrá que ver qué dice el Fondo.