Mientras espera que la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado fije la fecha de inicio para el proceso de juicio político en su contra, el juez de la Corte Suprema Antonio Boggiano recibió un apoyo celestial. Varios obispos del interior del país se comunicaron telefónicamente con algunos legisladores para interesarse por la suerte del supremo, de conocida vinculación al Opus Dei.
Distintas fuentes parlamentarias del oficialismo aseguraron que hubo varios llamados de parte de los prelados a senadores. Esto sucedió luego de que –según se supo– el propio magistrado envió a algunos gobernadores provinciales una copia de su fallo en la causa Meller, por la que el Estado fue condenado a pagar una indemnización millonaria. En su estrategia defensiva, Boggiano argumenta que su sentencia en ese expediente –uno de los tres en los que se encuentra acusado por mal desempeño– no fue igual a la del destituido Eduardo Moliné O’Connor.
Luego de la postergación que sufrió el martes el debate sobre el proceso contra el ex miembro de la “mayoría automática”, la fecha de inicio del juicio podría conocerse la próxima semana. Mientras algunos senadores opositores aseguran que este tipo de demoras ocultan “el poco interés del Gobierno en realizar el juicio político”, un importante vocero del bloque del PJ dejó en claro que “nadie va a dar la vida por Boggiano”.