Los enfermeros y técnicos del Hospital de Pediatría Juan Garrahan, que el miércoles iniciaron un paro en reclamo de un aumento de sueldos, desconocieron la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y mantuvieron la medida de fuerza. Piden una mejora en los salarios básicos del 70 por ciento, que las autoridades del hospital dicen no poder afrontar. El conflicto motivó la intervención de Néstor Kirchner, quien pidió a las partes “que trabajen juntos y encuentren rápidamente” una solución.
El Garrahan es el centro de atención pediátrica más importante del país. Recibe un promedio de mil pacientes por día en sus consultorios y tiene, además, 400 internados. Como brinda servicios de alta complejidad, al hospital llegan muchos pacientes derivados del interior.
Durante el primer día de paro el Ministerio de Trabajo envió inspectores y dictaminó que los servicios de guardia eran insuficientes. Intimó al gremio a levantar las medidas, pero los trabajadores sostuvieron que la atención de urgencias sí está siendo cubierta y siguieron adelante.
El paro abarca al personal no médico. El dirigente Gustavo Lerer (ATE-Garrahan) sostuvo que “los trabajadores de las categorías más bajas (por ejemplo los cadetes) cobran un básico de 400 pesos mientras que los enfermeros tienen básicos de entre 800 y 850 pesos”. Traducido a salarios de bolsillo, los cadetes “tienen sueldos promedio de 750 pesos” y los enfermeros de entre 900 y 1300”.