Apenas había comenzado la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado cuando la ex camarista Marina Zigliotto relató la coacción que sufrió por parte del poder político de San Luis. “Estoy acá para que me den garantías y para recobrar mi dignidad, para que mis hijos sepan por qué me fui del cargo a un mes y medio de haber asumido”, expresó ante los senadores que están analizando la posible intervención al Poder Judicial de esa provincia. Los miembros de la comisión también completaron el trámite de la acusación contra el ministro de la Corte Antonio Bo-ggiano, que hoy sería aprobada en el recinto, y recibieron el descargo del senador Raúl Ochoa, quien votó dos veces durante las elecciones de octubre de 2001.
En medio de sollozos, Zigliotto relató que en octubre estaba a punto de ser designada en la Cámara Penal cuando la convocaron desde el Ministerio de la Legalidad para que firmara una carta de renuncia sin fecha. En aquel momento se resistió a firmar su dimisión anticipada pero finalmente lo hizo porque se sintió intimidada cuando Mario Zavala, jefe de asesores del ministerio, le recordó el caso de un kinesiólogo que apareció asesinado en el fondo de un dique tras permanecer 17 días desaparecido. Luego la convocó el ministro de Legalidad, Sergio Freixes, para pedirle que protagonizara una “campaña de prensa” contra sus colegas de la Cámara que suelen denunciar al gobierno de los Rodríguez Saá. Zigliotto se negó y al día siguiente el Ejecutivo provincial anunció su renuncia, en el marco de un proceso de “transparencia”. Tras la denuncia de estos hechos, la mujer recibió la visita de dos personas cercanas al gobierno provincial a quienes grabó cuando reconocían que la maniobra de las renuncias anticipadas era un modo de frenar la intervención federal. La ex camarista entregó a la presidenta de la comisión, Cristina Fernández de Kirchner, una copia del video y otras pruebas.
La reunión de la comisión había comenzado con la presentación del descargo del senador nacional por San Luis Raúl Ochoa, acusado por haber votado dos veces durante las elecciones de octubre de 2001. Tras la declaración de Zigliotto, los senadores decidieron seguir recogiendo pruebas respecto de la intervención al Poder Judicial de San Luis y, por último, aprobaron de manera formal la acusación contra el ministro de la Corte Antonio Boggiano que hoy sería aprobada en el recinto. A partir de ese momento, el juez tiene 15 días para formular su descargo.