EL PAíS
El viernes se sabrá si el enroque entre Brandoni y Stolbizer cierra
La diputada radical no quiere bajar su candidatura a senadora y el actor Luis Brandoni no quiere postularse como diputado. Una comisión ad hoc tendrá dos días para convencer a los protagonistas.
› Por José Natanson
Luego de uno de esos encuentros eternos típicos de los radicales, el sector de la UCR bonaerense que lidera Federico Storani no logró convencer a Margarita Stolbizer de que cediera su candidatura a senadora a Luis Brandoni. Para no dejar al actor afuera, los radicales crearon una comisión integrada por intendentes y legisladores que tiene 48 horas para lograr que el protagonista de Buscavidas acepte encabezar la lista de diputados nacionales, como complemento actoral y masculino de la ratificada postulación de Margarita a senadora nacional.
La candidatura de Stolbizer se instaló naturalmente luego de las elecciones a gobernador del 2003, cuando sorprendió a propios y extraños arañando el 10 por ciento de los votos. Desde aquel momento, la diputada se consolidó como una síntesis ideal: es una cara nueva para el gran público, con un discurso sólido y un aire renovador, y al mismo tiempo mantiene los lazos con los sectores más fuertes del aparato provincial, que lideran desde siempre Storani y Leopoldo Moreau. Un ejemplo: Stolbizer hizo malabarismos para justificar la decisión de los bloques radicales de apoyar la decisión del presidente de la Cámara baja bonaerense, Osvaldo Mércuri, de aumentar su presupuesto en 30 millones de pesos.
Ya lanzada, la diputada comenzó a recorrer la provincia, distrito por distrito, hasta que la semana pasada Raúl Alfonsín definió un nuevo plan. Apoyado por Moreau y Storani, el ex presidente le pidió al actor que se candidateara para senador con el argumento de algunas encuestas –la semana pasada Página/12 publicó una de Equis– que le asignan una intención de voto superior al diez por ciento. En este escenario, Stolbizer lideraría la lista de diputados nacionales.
Claro que a la hora de disponer las candidaturas los caciques radicales no tuvieron en cuenta el carácter de la diputada, que se indignó cuando se enteró por los diarios del posible enroque. “Si mi candidatura surgió de una asamblea de 500 personas, sería imposible bajarla a partir de una propuesta de un grupo de personas con buena voluntad”, explicó Stolbizer.
Para darle a la movida un aspecto más orgánico, Storani convocó a un encuentro del sector interno que lidera y al que pertenece Stolbizer, la Corriente de Opinión Nacional (CON), que comenzó ayer por la tarde en la calurosa y descascarada sede del Comité Provincia. “Desde ya adelanto que si no soy candidata a senadora no seré candidata a diputada”, insistió Stolbizer antes de entrar.
La reunión, de la que participaron unos 300 dirigentes, comenzó con un breve discurso de Storani, que explicó los motivos del posible enroque y leyó una carta en la que Brandoni aseguraba que aceptaría postularse para senador, pero no para diputado.
Después se sucedieron los discursos, que tendieron a rescatar la figura de Stolbizer y justificar la necesidad de incluir al actor en algún lugar de las listas. Finalmente, luego de un debate de casi cinco horas, Storani admitió la negativa empecinada de su socia y propuso un nuevo plan, que fue aprobado: en otro gesto típicamente radical, se formó una comisión integrada por dos diputados, dos intendentes y representantes de las diferentes secciones, que le pedirá a Brandoni que acepte liderar la lista de diputados. La comisión se autoimpuso un plazo de 48 horas para convencerlo.
Detrás de los tironeos se esconde la dificultad del radicalismo para presentar una oferta competitiva de cara a los comicios de octubre, una disputa que se perfila difícil no sólo porque ya se anotaron Cristina Kirchner, Ricardo López Murphy y Marta Maffei, sino porque esta vez se eligen sólo cargos legislativos, lo que le impedirá a la UCR aprovechar la potencia electoral que aún conservan sus intendentes.