El futuro a corto y mediano plazo de la causa Cromañón plantea una serie de interrogantes. Se dice que el decisivo juicio oral se realizará recién en 2007, pero hasta entonces los protagonistas –jueces, acusados y familiares de las víctimas– deberán atravesar etapas que dejan numerosas preguntas que no son fáciles de responder.

1 La Justicia le otorgó la excarcelación a Omar Chabán. ¿Eso puede cambiar?

Sí. El fiscal intentará apelar la medida a la Cámara de Casación, a la que podría llegar si los integrantes de la Sala V conceden el recurso o por vía de una queja. El rumor en Tribunales es que buena parte de los jueces de Casación plantean tomar el caso –a diferencia de lo que han hecho en decenas de otros expedientes– alegando “gravedad institucional”. Todo va a depender de qué sala de Casación resulta sorteada, pero se dice que al menos la mitad de los jueces votarían la revocatoria de la excarcelación de Chabán. En ese tribunal hay magistrados, como Alfredo Bisordi, considerado un referente de las posiciones más conservadoras, que están ansiosos por pegarle un golpe jurídico a los dos jueces que votaron la libertad de Chabán, María Laura Garrigós de Rébori y, especialmente, a Gustavo Bruzzone, considerado uno de los jueces más progresistas.

2 ¿De manera que Chabán podría seguir preso?

Hoy en día Chabán es, insólitamente, un preso voluntario. Tiene propiedades, como su departamento de la calle Rodríguez Peña y la propiedad de la calle Salta donde fue detenido, que superan ampliamente los 130.000 dólares requeridos para la fianza. Su abogado, Pedro Dáttoli, que esperaría hasta la resolución de la Cámara de Casación, pero hoy es más vago en esa promesa asombrosa. En todo caso, la decisión clave la tomará Casación, que, según el rumor que hoy corre en Tribunales, podría revocar la excarcelación. Eso lo llevaría a Chabán a tener que esperar el juicio oral entre rejas.

3 ¿Qué va a suceder con Raúl Villarreal, el jefe de seguridad de Callejeros?

Villarreal está preso y lo más probable es que la Sala V de la Cámara del Crimen falle igual que en el caso Chabán, dándole la excarcelación. Pero, atención, que ese tribunal también deberá decidir la apelación presentada por los abogados de Villarreal por el procesamiento en el que se le imputó el delito de homicidio simple con dolo eventual. Los camaristas podrían cambiar esa calificación por otra más leve: homicidio culposo.

4 A partir de mañana declararán los integrantes de la banda Callejeros ¿De qué se los acusa?

El juez Julio Lucini les imputa homicidio culposo, lo que significa producir la muerte de personas por negligencia o imprudencia. Como se dijo, la pena va de dos a cinco años de prisión y es excarcelable. En concreto, el juez dice que Callejeros alentó el uso de bengalas y permitió el ingreso de muchas más personas de las permitidas por la habilitación de Cromañón. En su contra se usará la grabación de una entrevista realizada por Juan Di Natale en la radio Rock and Pop y que nunca salió al aire. En esa entrevista un integrante de Callejeros, el baterista Eduardo Vázquez dijo que las bengalas fueron “la frutilla del postre” y que “metimos 4000 personas” en Cromañón.

5 ¿Cómo se defenderán los integrantes de Callejeros?

Por de pronto, exhibirán una serie de videos de recitales de bandas de rock en las que el público arroja bengalas. Algunos de esos recitales fueron incluso auspiciados por el Gobierno de la Ciudad. Exhibirán también un recital de ellos mismos en Obras Sanitarias, donde también se tiraron bengalas, hubo tres fiscales contravencionales y no se tomó medida alguna. “Las bengalas no estaban prohibidas sino incluso promovidas por el Gobierno de la Ciudad”, de manera que argumentarán que no hicieron nada ilegal. Además, dirán que en cualquier caso los músicos son artistas, no organizadores de recitales, papel que les corresponde a los empresarios, productores y managers, por lo cual consideran que no tienen responsabilidad en temas que tienen que ver con la organización, como por ejemplo, el cupo de gente permitido por la habilitación de un local. Uno de los ejemplos que van a dar es que cuando Carlos Bilardo, en la cancha de River, sacó una supuesta botella de champagne, de inmediato intervinieron fiscales contravencionales que, luego del análisis químico, determinaron que fue “Gatorei”. “Si tres fiscales no intervinieron contra las bengalas en Obras Sanitarias ¿por qué lo tienen que hacer los artistas?” será el argumento.

6 ¿Cuál es el pronóstico para los integrantes de Callejeros?

Quienes conocen la causa y la actuación del juez Julio Lucini aseguran que lo más probable es que los procese por homicidio culposo.

7 Después de Callejeros, ¿cuál será el siguiente paso?

Existe una causa paralela en el caso Cromañón denominada “abandono de persona” y que tiene que ver con la respuesta que le dieron los Bomberos, la policía y el SAME a la emergencia planteada aquella noche. Se trata de un delito grave, con penas que van de los cinco a los quince años. El argumento de la acusación –sostenida por parte de los familiares de las víctimas, no todos, y legisladores de la oposición– es que cuando se produjo la tragedia “no hubo operativo alguno”: no se acordonó la zona, tardaron las ambulancias, faltó oxígeno para afrontar la intoxicación con gas que tenían las víctimas y los Bomberos actuaron mal. Hay un punto importante en esta acusación que es el siguiente: la falta de cordón policial para aislar el lugar rápidamente y la supuesta mala actuación de los Bomberos, permitieron que jóvenes que ya habían salido volvieran a ingresar para salvar a otra gente. Varios de esos jóvenes que reingresaron, terminaron muriendo.

8 ¿Cuál será la respuesta a esas acusaciones?

En el SAME dicen que derivaron más de 800 chicos para su internación, que a muchísimos se los atendió en el lugar y que la respuesta fue adecuada. Incluso afirman que les sobró el oxígeno porque estaban preparados para un fin de semana larguísimo y conflictivo como es el de Fin de Año. Los Bomberos e integrantes de la Policía Federal van a decir que fue imposible realizar el cordón: “En Cromañón había 4000 personas adentro, mil afuera que no tenían entrada, más la gente que se sumó rápidamente. Existía un grado extremo de locura y desesperación que llevó a enfrentamientos físicos entre jóvenes y policías cuando se trató de armar el cordón. Fue imposible frenar a la gente, se hubieran necesitado gases lacrimógenos y mucha violencia, algo que iba a producir una situación peor”, alegan voceros de los Bomberos y de la policía. Todos los que actuaron esa noche agregarán un argumento. Sólo con el correr de las horas se percibió la magnitud de lo que pasaba. Inicialmente la información es que hubo una pelea adentro, con poca gente involucrada. Luego un incendio, pero con unas diez o 20 víctimas. Después que el pánico a la salida produjo muertes por golpes o porque les pasaban por arriba. Tardó mucho en saberse quehabía una intoxicación masiva por los gases emanados por la combustión del techo.

9 ¿Qué puede pasar con Bomberos, policías e integrantes del SAME?

Seguramente el argumento del juez será que no hubo profesionalismo y que lo que existió fue imprevisión. Los organismos debían estar preparados para la emergencia y un incendio e intoxicación masiva en un boliche no es algo tan imprevisible. Al punto que existe un Manual Operativo para la Emergencia, con la enumeración de pasos muy detallados, que aparentemente se incumplieron. El jefe del Comando Operativo de Emergencia –así está establecido– es el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra. Respecto del cordón, el instructivo dice que hay que hacerlo sí o sí, cueste lo que cueste. También hubo hombres del SAME, que discrepan con su conducción, que declararon que ante una intoxicación masiva no debió derivarse tanta gente a los hospitales sino atenderlos en el mismo lugar con oxígeno. No faltaron tubos, pero sí máscaras y en muchos casos, no funcionaron las válvulas. Todo este cuadro posiblemente lleve al juez Lucini a procesar a funcionarios, no por abandono de persona sino por incumplimiento de los deberes de funcionario público, un delito con penas que van de un mes a dos años de prisión y es excarcelable.

10 ¿Qué va a ocurrir con Aníbal Ibarra y los funcionarios de mayor rango?

Los familiares pidieron esta semana que se lo acuse por homicidio simple, dado que tenía informes de la situación calamitosa en la que estaban los boliches y no ordenó ni inspecciones ni clausuras. Es muy improbable que prospere una acusación de ese tipo. Existe una causa paralela llamada “asociación ilícita” en la que se investiga si no hubo una especie de organización integrada por Ibarra y sus funcionarios más cercanos, con los que mantenía una estrecha relación política, que aplicaba estrategias ilícitas como la de no inspeccionar y que incluso de allí se obtenían fondos para la actividad partidaria. Es casi seguro que esa causa no prosperará, aunque un rumor indica que hay algún funcionario de segunda línea que podría ser procesado por enriquecimiento ilícito. Según se afirma, al jefe de Gobierno no se le imputaría responsabilidad directa, por cuanto la función de inspeccionar y clausurar era de sus subalternos, no de él, y no existe orden expresa de que no se inspeccione ni se clausure. Sin embargo, el rumor más extendido –anticipado por Página/12 hace una semana– es que sería llamado a indagatoria a fines de junio por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público.