EL PAíS
› LA SITUACION EN EL DUHALDISMO DESPUES DE LA FUGA DE INTENDENTES
El reagrupamiento de la tropa propia
Quiénes se fueron. Ante el éxodo, los caciques de Duhalde empiezan a criticar a Kirchner.
› Por Martín Piqué
“Un acuerdo no significa rendición”, se lamenta el intendente. Es duhaldista y lo seguirá siendo. Está enojado, al igual que Eduardo Duhalde, por la fuga en masa que viejos compañeros están haciendo al kirchnerismo. “En estas condiciones va a haber confrontación”, pronostica el jefe comunal. Hombre del conurbano, habla en nombre del duhaldismo. Sugiere que Néstor Kirchner es demasiado ambicioso y que eso desembocará en una fractura. “Si vos me querés imponer a Cristina, bueno. Pero partir la provincia y darnos un 33 por ciento es demasiado”, argumenta. Molesto, el duhaldista sabe que van a una derrota, aunque advierte que la ruptura impedirá que el Presidente logre el plebiscito que tanto busca. “Pierde Capital, Santa Fe y, si todo sigue así, Santa Cruz. Kirchner cambió la tranquilidad en el país por ganarnos esta vez.”
El cacique duhaldista forma parte del grupo de dirigentes que siguen apoyando a Duhalde. La mayoría son del sur del conurbano, como su jefe. Han sido muy críticos de Felipe Solá, a quien detestan, pero hasta ahora no cuestionaron a Kirchner. Al menos en público. “Acá se acabó la joda. Cada uno va a jugar su carta más fuerte. Nos cansamos de separar a Felipe del Presidente. Eso también va a cambiar”, amenaza. Habrá que ver si la advertencia se traslada a la agenda mediática en los próximos días. Si se mira para atrás, sólo Chiche Duhalde llegó a cuestionar a Kirchner por su decisión de no asistir a los funerales de Juan Pablo II o, más acá, por criticar a la alianza entre Ricardo López Murphy y Mauricio Macri.
El diálogo del intendente con Página/12 se produjo ayer, mientras en los cuarteles del duhaldismo hacían un recuento de la tropa propia. El recuento se volvió imprescindible tras los movimientos de la última semana. El jueves, varios intendentes confirmaron su pase al kirchnerismo luego de visitar la Casa Rosada. Se lo ratificaron al propio Néstor Kirchner. Se trata de Alberto Descalzo (Ituzaingó), Julio Pereyra (Florencio Varela), Raúl Othacehé (Merlo), Andrés Arregui (Moreno), Mario Ishii (José C. Paz) y Humberto Zúccaro (Pilar). En ese grupo también está Alberto Balestrini (La Matanza), quien se había pasado mucho antes.
“Este no es un espacio de Solá, sino un espacio del Presidente”, subrayó ayer uno de los flamantes intendentes K. La aclaración, dicen los propios involucrados, es importante porque hay muchos dirigentes que quieren sumarse a la candidatura de Cristina Kirchner sin quedar asociados al gobernador. Pero esas distinciones ya no producen ningún efecto en las cercanías de Duhalde. Allí piensan que ambos sectores son lo mismo, tras comprobar que Kirchner decidió no soltarle la mano al gobernador ante eventuales problemas de “gobernabilidad”.
“No existe el kirchnerismo alejado del felipismo. Porque el Presidente no es ajeno a la realidad de Felipe.” En el duhaldismo ya no diferencian a Kirchner de Solá. No les queda más remedio. Los últimos acontecimientos no dejaron espacio ni para la más mínima duda.
- El miércoles, el jefe del bloque del PJ José María Díaz Bancalari y los intendentes Hugo Curto (Tres de Febrero) y Juan José Mussi (Berazategui) fueron a la Rosada para reunirse con Kirchner. Los tres iban en calidad de delegados de Duhalde, quien los eligió como negociadores. El Presidente no los quiso recibir y los derivó al jefe de Gabinete.
- El jueves, Kirchner respaldó a Solá con la refinanciación de una deuda por 1260 millones de pesos.
- También el jueves, Descalzo y Pereyra estuvieron con Kirchner. Allí se estrenó el grupo de nuevos intendentes K. Un día después fue a Balcarce 50 el hombre fuerte de Moreno, Mariano West, otrora ultraduhaldista. Acordó sumarse con el intendente de su distrito, Arregui. Confiados, en ese grupo aventuran que las próximas incorporaciones serían el diputado provincial Julián Domínguez y, aún no confirmado, los jefes comunales Luis Acuña (Hurlin- gham) y Gerardo Amieyro (San Fernando). El duhaldismo piensa resistir. En Lomas de Zamora están estudiando que Chiche sea candidata pero no a senadora sino a diputada. Y que otra figura –“peronista”– encabece la lista. El tiempo se acaba. El 30 de junio vence el plazo para oficializar las candidaturas.