“No hablemos más de acuerdo, el acuerdo terminó, ahora miremos al futuro”, lanzó ayer el ministro del Interior, Aníbal Fernández. La frase futurista se referencia en las frustradas negociaciones con el duhaldismo para conformar una lista única de candidatos en la provincia de Buenos Aires, punto que distintos hombres del Gobierno se han encargado de descartar de forma tajante en las últimas horas. “No va a haber un acuerdo que burle la voluntad de la gente, que aparezca amañado para sacar ventaja”, subrayó el ministro. Con el lanzamiento de Cristina Kirchner previsto para el jueves, los kirchneristas descartaban cualquier negociación. Sin embargo, en el duhaldismo insistían en que de acá al 24 de agosto –fecha de cierre para las candidaturas de una alianza electoral– habrá mucha tela para cortar.
El fin de semana sirvió para que los hombres más cercanos al presidente Néstor Kirchner terminaran de echarle las últimas paladas de tierra al fenecido acuerdo. Ayer, en una entrevista publicada por Página/12, fue el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien calificó como “imposible” llegar a un entendimiento con Eduardo Duhalde. Explicó que el motivo de la ruptura fue la ambición de Duhalde de ocupar más puestos que los pactados en las listas de candidatos nacionales.
Aníbal Fernández tomó la posta. Hombre de la provincia de Buenos Aires –fue intendente de Quilmes– y alguna vez duhaldista, el ministro del Interior insistió en que “no va a haber acuerdo” entre Kirchner y Duhalde. Además, consideró que una marcha atrás en el tema podría considerarse “burlar la voluntad de la gente”. “Sería una falta de respeto a la sociedad, a los candidatos y a la nueva lógica de la política”, expresó.
Luego hizo algunas consideraciones referidas al papel tomado por Duhalde, aunque sin mencionarlo. “La estrategia del presidente de la Nación es la que los peronistas tienen que abonar y tienen que acompañar”, sostuvo. Y añadió: “¿Cómo vamos a conspirar contras las estrategias del Presidente porque tenemos ambiciones personales de por medio?”.
A contrapelo de las declaraciones de los hombres del Gobierno, los duhaldistas prefirieron el bajo perfil. Luego de aquella reunión del jueves pasado en la que el propio Duhalde anunció que el PJ bonaerense inscribiría la fórmula Hilda “Chiche” Duhalde y José María Díaz Bancalari para senadores, y a Jorge Villaverde como primer candidato a diputado, se llamaron a silencio. Durante el fin de semana, los operadores del ex presidente insistieron en que esas candidaturas, aunque sean anotadas en la Justicia electoral este jueves, pueden ser modificadas si llegan a un acuerdo de unidad.
“De acá al 24 de agosto se abre una instancia de negociación, todas las candidaturas pueden ser modificadas”, explicaba ayer un vocero del duhaldismo. Así quedaría confirmado que el lanzamiento extraoficial de Chiche, en el mismo momento en que desde el Gobierno se le reclamaba que desistiera de postularse, fue un desafío de Duhalde para intentar negociar desde una posición de mayor fortaleza. Pero la felicidad de esa jugada está en veremos.
Ayer, Aníbal Fernández no descartó la posibilidad de que el kirchnerista Frente para la Victoria arme alianzas con otros partidos. Pero de ninguna manera esos acuerdos serán “una burla a la gente”.