Fernanda Ferrero, diputada por Juntos por Buenos Aires y presidenta de la comisión de la Legislatura que investiga la tragedia de Cromañón, fue fundadora de Vanexva, la financiera utilizada por los hijos de Emilio Massera para blanquear, entre otros, los dineros mal habidos del ex almirante. Luego, la financiera apareció transferida a los hermanos Emilio Esteban y Eduardo Enrique Massera, este último preso por haber contribuido a desapoderar de sus valiosos bienes al bodeguero Victorio Cerutti, su yerno Omar Masera Pincolini, el abogado Conrado Gómez y el contador Horacio Palma. Del mismo modo que Misa Chico, sociedad a la que fueron transferidos los terrenos de Chacras de Coria arrebatados a los empresarios mendocinos, Vanexva fue parte del proyecto de poder y enriquecimiento de Massera y los oficiales de la ESMA que lo secundaron en el pillaje. Pese a los cambios de nombres, Ferrero no se desvinculó de Vanexva: por el contrario, fue su relacionista pública de 1988 a 1992, cuando la financiera se rebautizó como Financiera del Tuyú. El hilo conductor de esta curiosa historia lo suministró una información en apariencia poco importante: el currículum que Fernanda Dina Bendinelli de Ferrero entregó a la página web de Poder Ciudadano.
De acuerdo con la información obrante en el legajo 261.181 de la Inspección General de Justicia, Vanexva fue constituida el 16 de diciembre de 1973. La financiera fue inscripta ante el escribano Carlos Gori Juliano, y Guillermo Héctor Ferrero, esposo de la diputada, era uno de sus accionistas fundadores. También como accionista fundadora figuraba Fernanda Dina Bendinelli de Ferrero. El hermano de la diputada no quedó fuera del emprendimiento: Enio Bendinelli fue designado director. La sede social de Vanexva se estableció en la calle Tucumán 766, piso 11, de la ciudad que con los años Fernanda Ferrero representaría. La ubicación geográfica de Vanexva no resultaría significativa de no tratarse del mismo lugar donde constituyó domicilio el ex almirante Massera cuando compareció en calidad de imputado por la desaparición de Cerutti, Masera Pincolini, Gómez y Palma.
En 1987, debido a un aumento de capital, Guillermo “Mito” Ferrero dio como domicilio legal Rodríguez Peña 1409, piso 6, departamento “A”, de capital. Esa dirección fue utilizada asimismo por Raúl Wendeler al constituir Azuka, una sociedad con fines inmobiliarios que la Asociación Madres de Plaza de Mayo identificó como parte de la constelación empresaria del ex marino. Un año más tarde, el 9 de diciembre de 1978, Vanexva volvió a cambiar su sede. La nueva dirección resultó así Reconquista 458 piso 9 –siempre de la Capital–, inmueble propiedad de Luz del Sur SA, creada por los Massera para registrar la quinta de El Talar de Pacheco, próxima a la fábrica Ford, donde el genocida pasó las primeras semanas de su detención domiciliaria, en mayo de 1999. Luz del Sur estuvo integrada en un inicio por Roberto Castellanos, escribano y “amigo de los burros” de Massera, Roberto de la Lastra, su cuñado, y María Luz Méndez Ezcurra, mujer de su hijo mayor Eduardo Enrique, hoy tras las rejas. En 1991, Luz del Sur quedó integrada por Lily Vieira, mujer de Massera, su nuera María Luz Méndez Ezcurra y a las dos mujeres se agregó el hijo menor del almirante Cero, Emilio Esteban.
Los dos hijos del ex almirante hacen su aparición formal como miembros de la financiera recién en 1984. Lo hicieron en calidad de directores. Su condición de accionistas se blanquearía mucho después, en febrero de 1995, a causa de un aumento de capital. Con ellos coexistieron hasta 1989 Guillermo Héctor Ferrero, esposo de Fernanda Dina Bendinelli, y otro patriota más, Alejandro José Basualdo. Fernanda Dina, de acuerdo a su propia declaración jurada, se mantuvo prestando servicios en la financiera desde 1988 hasta 1992. Su rol, según consta en la página web de Poder Ciudadano, era el de relaciones públicas de la entidad. A esas alturas, Fernanda Dina Bendinelli de Ferrero era una mujer hecha y derecha y nadie con tales características podía aducir ignorancia respecto de los crímenes del almirante y las andanzas de sus beneméritos hijos. Es más: Massera padre era visita habitual en las oficinas de Vanexva.

Cambia, todo cambia:

Marplatense, con estudios de turismo, antes de su largo paso por Vanexva, Bendinelli de Ferrero recordó en su currículum haber sido socia de M y F Inmobiliaria desde 1982 a 1986 y socia gerente de Fior, una fábrica de bijouterie entre 1988 y 1992, actividad que compartió con la representación de Vanexva. El ingreso a la política data de 1987, de la mano de la Unión de Centro Democrático, el partido liderado por los ingenieros Alvaro y María Julia Alsogaray.
La detención del primogénito Eduardo Enrique Massera, ordenada por el juez federal Sergio Torres en junio de este año, reactualizó, por pura casualidad, la parte más conflictiva de esa biografía. El juez Torres hizo oídos sordos al argumento de que los hechos relacionados con Cerutti, Masera Pincolini, Palma y Gómez ya habían sido investigados por Rodolfo Ricotta Denby y al imputado le cabía, por lo tanto, la aplicación del “non bis in idem” (nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito). Tras las largas declaraciones tomadas a los sobrevivientes, Torres determinó que existían elementos suficientes para creer que Massera hijo había sido una pieza indispensable en la maniobra de secuestro, despojo y apropiación de los bienes del grupo empresario formado por los cuatro propietarios de Cerro Largo, la sociedad a cuyo nombre se encontraban las tierras de Chacras de Coria valuadas en casi 20 millones de dólares. Con falsos poderes y documentos firmados por los secuestrados en los sótanos de la ESMA, los terrenos fueron a parar a poder de Misa Chico, el nombre tras el que se ocultaban Eduardo Massera (hijo), Carlos Massera (hermano del ex almirante) y Pedro Añón, el hombre que fue cabeza visible del frustrado Partido por la Democracia Social. Junto a Massera hijo se encuentran detenidos, como parte de esa trama delictiva, los marinos Jorge Perren, Jorge Acosta, Jorge Radice y Alberto González Menotti. Las complicidades civiles de esa tragedia comienzan a aflorar.