El presidente Néstor Kirchner recibió ayer a Cecilia De Vincenti, hija de la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor, quien fue secuestrada y asesinada durante la última dictadura militar. Los restos de Azucena fueron recientemente identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense, junto con los de Esther Ballestrino de Careaga y María Eugenia Ponce de Bianco, otras dos Madres de Plaza de Mayo desaparecidas. Los tres cuerpos fueron hallados durante la dictadura en las playas bonaerenses y luego enterrados en el cementerio de General Lavalle, donde permanecieron como NN durante 28 años. En la reunión entre Kirchner y De Vincenti también estuvieron el nieto de Azucena, Federico Villarroel, y el abogado de la familia, César Lipovesky, además del secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.