La cumbre de presidentes del Grupo Río, prevista para el jueves y viernes próximo en Bariloche, fue postergada al menos hasta diciembre. La razón que dio la Cancillería fue que varios mandatarios habían avisado que no podrían concurrir debido a los problemas internos que tenían que afrontar en sus países. “La agenda internacional se ha vuelto muy difícil, hace falta optimizar el tiempo del que disponemos”, justificó ayer Aníbal Gutiérrez, jefe de asesores del canciller Rafael Bielsa. Si bien no habrá encuentro de presidentes, quedó en pie la reunión de los 19 cancilleres.