Unos días atrás había dicho que la provincia “no es apta para pingüinos”. Ayer decidió que sería ella la que pisaría la Capital y eligió una fecha cargada de resonancias: el último día de gobierno de Juan Domingo Perón en 1955. La candidata a senadora Chiche Duhalde –pues de ella se trata– presentó en la sede del PJ bonaerense, en Avenida de Mayo al 800, al lado del Café Tortoni, los cuatro ejes de su campaña de cara a las elecciones del 23 de octubre. Propondrá bajar las retenciones a las exportaciones, eliminar el trabajo en negro, aumentar los subsidios a indigentes y reclamar una mayor coparticipación para la provincia de Buenos Aires.
Chiche habló brevemente, escoltada por el segundo en la lista, José María Díaz Bancalari, y por el titular de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño, una de las espadas mediáticas del duhaldismo. “Nos llama a la sorpresa el nivel de agravios de la campaña”, remarcó al iniciar la conferencia de prensa Díaz Bancalari.
También estuvieron presentes el primero en la lista a diputado nacional, Jorge Villaverde junto a la senadora chichista Mabel Müller y el candidato y empresario Francisco De Narváez. El control de la entrada estuvo muy restringido, hasta el punto de que se quedó afuera Tula, que se hizo conocido por tocar el bombo en los actos de Carlos Menem.
La candidata consideró que “es un delito” el trabajo en negro y anticipó que, desde el Congreso, va a impulsar junto a los legisladores duhaldistas una ley para brindar “un ingreso por familia que contemple la línea de la indigencia, que actualmente es de aproximadamente 360 pesos y que se actualice de acuerdo al costo de la canasta familiar”. Como viene haciendo en otros actos, reclamó que la Nación aumente los puntos de coparticipación de la provincia de Buenos Aires. “Es un compromiso de campaña del presidente de la Nación devolver los puntos de coparticipación que nos fueron quitados”, recordó sobre las promesas de Néstor Kirchner en 2003, en lo que se configura un caballito de batalla duhaldista.

Informe:
Werner Pertot.