EL PAíS
AVELLANEDA
El intendente de Avellaneda, Baldomero Alvarez de Olivera, y el titular del Sindicato de Municipales, Rubén García, mantuvieron ayer una negociación sobre los reclamos salariales que derivaron en los graves incidentes del miércoles, tras una convocatoria del gobierno bonaerense. Pese al intento de mediación que hizo el ministro de Trabajo bonaerense, Roberto Mouillerón, su par de Gobierno, Florencio Randazzo, renovó sus críticas al jefe comunal duhaldista, al que relacionó con “matones”. La reunión terminó sin acuerdo, debido a que ambas partes mantuvieron sus posiciones, por lo que se decidió levantarla hasta el lunes, cuando se volverán a ver las caras los dos dirigentes que protagonizaron el enfrentamiento que terminó con tres personas heridas, una de bala. García calificó el encuentro, que se realizó en la Casa de Gobierno de La Plata, como “muy duro” y reveló que, “si bien se avanzó en el diálogo, no hubo propuestas que nos satisfagan”. Por su parte, el municipio de Avellaneda informó en un comunicado de prensa que presentó “las propuestas que económicamente puede afrontar, no llegando a un acuerdo con la conducción del STMA, dirigida por su secretario general, Rubén García”. Tras la reunión, el intendente fue consultado sobre si los disparos de armas de fuego realizados durante los incidentes partieron desde adentro del edificio y respondió que “eso lo esta investigando la Justicia”.