A pesar de los golpes y de la enésima detención de su líder, Raúl Castells, el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD) ocupó el Mercado de Pulgas, inauguró un merendero y se quedó allí en vigilia. Poco antes de las 19 se produjeron incidentes cuando la policía intentó impedir el acceso de los seguidores de Castells al predio de Alvarez Thomas y Dorrego. “Han militarizado la zona por una escuela y un comedor”, se quejó el dirigente antes de ser trasladado a la comisaría 31.

En diálogo con este diario, Ovidio Pepe, del MIJD, confirmó que Castells está preso con otros ocho militantes de esa agrupación y que estaría acusado de haber robado dos celulares a la policía. “Nos llamó desde la comisaría, nos dijo que está bien y que tengamos calma, pero que mantengamos la vigilia aquí en el nuevo comedor”, comentó. Según Pepe, el emprendimiento se inauguró “con el Himno y todos los chiches, a pesar de todo lo que hicieron para que el mercado no se abriera”.

Por su parte, el Gobierno de la Ciudad informó que la ministra de Derechos Humanos y Sociales, Gabriela Cerruti, se reunió con Castells, “con quien se comprometió a colaborar con los comedores comunitarios que dependen del MIJD”, según consta en un comunicado. “Pese a este compromiso, y desatendiendo los riesgos que implicaría la instalación de un comedor dentro de las precarias condiciones edilicias que presenta el Mercado de Pulgas, Castells manifestó su decisión de seguir adelante con el propósito”, afirmaron las autoridades de la Ciudad. A partir de ese momento, el ministro de Producción, Enrique Rodríguez, cursó pedidos a la Justicia y a la Policía Federal para impedir el ingreso al mercado de todas las personas que no estuvieran autorizadas a hacerlo.

“Tanto empecinamiento nos hace pensar en que hay un negociado”, opinó Pepe. Este dirigente del MIJD aseguró que Castells recibió llamados de los funcionarios para que no concretara la inauguración. “Ahora no pueden desalojar a la gente porque a partir de hoy funciona un comedor y una escuela de oficios”, aventuró. La versión de los hechos que presentó el MIJD indica que Castells fue convocado para conversar por las autoridades de la comisaría 31 y en ese momento fue detenido. “La gente salió detrás de él y la policía le pegó a la gente, los arrastraron por el suelo, hubo heridos trasladados en ambulancia y una compañera que se desmayó por los golpes que recibió en el estómago”, describió Pepe. Cuando la policía se retiró, los militantes permanecieron en el predio y anunciaron que si su líder no sale en libertad en las próximas horas harán una nueva manifestación.

El Gobierno de la Ciudad precisó que “se decretó el desalojo del Mercado de Pulgas porque su deterioro es grave, con el objetivo de proteger la seguridad de los feriantes, de sus visitantes y de los vecinos”. El desalojo fue autorizado por la Justicia el 12 de abril, mientras que los feriantes disponen de un predio alternativo desde el 23 de diciembre.

Ayer no fue un buen día para el dirigente piquetero. Antes de los incidentes, Castells había confirmado la intimación de la Corporación Puerto Madero para que retire el otro comedor que inauguró en esa zona.