Néstor Kirchner convocará al Consejo del Salario para consensuar con empresarios y sindicalistas un incremento el salario mínimo, vital y móvil. Así se lo hizo saber a los dirigentes gremiales Andrés Rodríguez y Gerardo Martínez, durante un encuentro en la Casa Rosada. El Presidente aprovechó la reunión para solicitarles la participación activa de la CGT en el acto que se realizará el 25 de mayo en apoyo al Gobierno.

Kirchner recibió a la dupla sindical el miércoles a la noche. Compartieron un café durante casi una hora y media. Y navegaron por un mar de temas que trascendieron lo estrictamente gremial.

Fue al promediar la reunión cuando el Presidente blanqueó la decisión oficial de convocar al Consejo del Salario. No dio una fecha precisa, pero hizo saber que ocurrirá una vez que concluya la ronda de paritarias que se desarrolla por estos días con los gremios del sector industrial.

El Presidente quiere sacar provecho de esos acuerdos. Y así como anunció la mejora de los camioneros y los mercantiles desde la propia Casa Rosada, ahora le prometió a Gerardo Martínez que hará lo propio con sus trabajadores de la construcción (Uocra), quienes –según ya preacordaron– tendrán un aumento salarial del 19 por ciento. De hecho, en medio de la reunión, encargó al secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, que organice ese acto.

Volviendo al Consejo del Salario, hace varias semanas que el Gobierno estudia un aumento del ingreso mínimo de alrededor de 100 pesos. Y de eso está al tanto el titular de la CGT, Hugo Moyano, quien mantiene contactos telefónicos casi diarios con el staff oficial, principalmente con el ministro de Planificación, Julio De Vido, y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.

En la actualidad, el salario mínimo vital y móvil es de 630 pesos. Formalmente, la CGT quiere elevarlo a 850 pesos, para ponerlo sobre la línea de la pobreza. No obstante, se dará por satisfecha si finalmente se fija un incremento de entre 100 y 150 pesos.

Durante la conversación, Kirchner tampoco descartó la formación de un Consejo Económico Social, un ámbito creado tras la reforma constitucional de 1994, pero que nunca se activó. “El Presidente considera que tiene que haber espacios donde tiene que producirse un debate de ideas”, señaló la fuente sobre una voluntad que no todos creen que tenga el primer mandatario.

Martínez y Rodríguez –este último, líder del gremio estatal de UPCN– también escucharon el deseo del Presidente de “reordenar” el peronismo, acompañado de su creencia de que “con el PJ sólo no alcanza para administrar poder”. Kirchner reconoció que no está predispuesto a tomar las riendas partidarias de manera activa sino que, a lo sumo, aceptaría un cargo honorario.

La duda es si el peronismo podría ordenarse sin que las distintas corrientes internas entren en colisión. El Presidente aspira a rearmar la cúpula del PJ de manera consensuada, pero no se muestra con ánimo de protagonizar una puja con Carlos Menem o Adolfo Rodríguez Saá por cuestiones partidarias.

Kirchner les brindó a sus invitados un panorama de la situación del país. Habló de los 22 mil millones de reserva, el incremento de la recaudación, la hipótesis de una inflación anual del 11 por ciento y de una desocupación de un dígito para el último trimestre del año.

Nadie sabe si fue el preámbulo para convencerlos de sumarse a la Plaza del Sí que el kirchnerismo de pura cepa le está organizando al Presidente en la Plaza de Mayo. Lo cierto es que Kirchner, sin ruborizarse, los convocó a Rodríguez y Martínez, como lo viene haciendo con el resto de los integrantes de la CGT y también con los intendentes del conurbano bonaerense, a participar de la concentración que se realizará el 25 de mayo.