La imagen es prometedora. Con la ciudad entrerriana de Gualeguaychú como telón de fondo, Kirchner buscará mostrarse con casi todo el arco de gobernadores provinciales en lo que resulta un claro desafío dirigido al gobierno de Tabaré Vázquez. Entre quienes ya confirmaron su participación figuran el jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman; el gobernador bonaerense, Felipe Solá, y los gobernadores justicialistas Gerardo Zamora, de Santiago del Estero; Jorge Obeid, de Santa Fe; Mario Das Neves, de Chubut; Carlos Sancho, de Santa Cruz; Angel Maza, de La Rioja; Eduardo Brizuela del Moral, de Catamarca; Carlos Verna, de La Pampa; José Manuel De la Sota, de Córdoba; José Alperovich, de Tucumán; José Gioja, de San Juan; Gildo Insfrán, de Formosa, y Hugo Cóccaro, de Tierra del Fuego. Quienes aún no se sabe qué harán son el jujeño Eduardo Fellner –cuya provincia atraviesa una crisis de agua– y el antikirchnerista Juan Carlos Romero. Según explicó su vocero, el jefe de Salta “no había podido tomar la decisión porque no recibió el documento que firmarán los dirigentes”.

Mientras que desde la UCR, el rionegrino Miguel Saíz y el mendocino Julio Cobos sí adhirieron a la cita. Es más, Cobos será uno de los oradores. La confirmación llegó luego del guiño del titular del radicalismo, Roberto Iglesias, quien consideró “positivo que estén presentes, ya que se trata de un acto de unidad nacional y no un tema partidario”.

El mensaje, sin embargo, no parece haber calado de igual manera entre algunos de los líderes regionales. Tras calificar la iniciativa como un “megashow montado por el Presidente”, el gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, rechazó la invitación. Lo mismo hizo su par de San Luis, Alberto Rodríguez Saá. Ambos se encargaron de aclarar que están de acuerdo con la protesta por las papeleras, pero no así con la iniciativa del oficialismo. “Apoyo todo el trabajo que se lleve adelante para la defensa del medio ambiente. Pero esta no es una reunión de gobernadores, es un acto político del Presidente”, señaló Sobisch al explicar la posición.

Una situación más difícil es la que atraviesan aquellos dirigentes cuyas provincias aparecen más involucradas en el tema, como el caso del gobernador correntino, Arturo Colombi, que todavía estaba definiendo su asistencia al acto. Ocurre que el dirigente actualmente está gestionando la instalación de una papelera chilena en su provincia. Ayer, su vocero aseguró que por esta razón estaba evaluando su asistencia, aunque aclaró que “resulta indudable su compromiso con el medio ambiente”, con lo cual “sería casi segura su presencia”.

En realidad, la cuestión fue matizada tanto desde la provincia como desde el oficialismo, ya que uno de los peores pronósticos para el Gobierno sería que la discusión de las papeleras se convirtiese en un conflicto fronteras adentro. Por ahora, igualmente, el panorama pinta optimista. Anoche el equipo conformado por los técnicos de Cancillería, los abogados de la provincia de Entre Ríos y especialistas en Derecho Internacional trabajaban a contrarreloj para ultimar los detalles de la demanda que se llevará mañana ante La Haya. Aunque no se dio a conocer mayor información sobre la presentación, fuentes de Cancillería aseguraron que “está muy avanzada”, con lo cual la fecha parece inamovible.