La vieja máxima dice que “en política los espacios vacíos siempre se llenan”. El gobernador Felipe Solá lo sabe bien. Y por eso está a la caza de lugares vacantes. El rol de interlocutor estable con el bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria podría ser un ejemplo. Porque la mayoría de los diputados kirchneristas, cuando hablan en confianza, se quejan de que reciben poca atención de la Rosada. Algunos legisladores comparan su situación, de cierto aislamiento frente al Ejecutivo, con la atención que recibe el ex duhaldista José María Díaz Bancalari, visitante frecuente del jefe de Gabinete, Alberto Fernández. Con este antecedente, en La Plata decidieron crear una “comisión de acción parlamentaria” para garantizar una comunicación permanente entre la gobernación, los legisladores provinciales y los diputados K.

Los movimientos de Solá no son fortuitos. Sin descuidar la gestión –en su entorno adelantan que este año se dedicará a exhibir resultados en obra pública–, el gobernador no pierde de vista su futuro político. Hace unas semanas dijo públicamente que le encantaría acompañar en la fórmula a Néstor Kirchner en el caso de una eventual reelección. Aquello fue una rareza en el medio del silencio sobre el escenario post-2007 que se impuso como norma. Solá sabe que a Kirchner no le gusta adelantar las peleas por cargos y que quien no cumple con esa directiva puede sufrir lo que advierte un viejo dicho vaticano: “Quien entra como Papa sale cardenal”.

La comisión de acción parlamentaria que impulsan los diputados y legisladores cercanos a Solá tiene un objetivo político. Buscan asegurar una comunicación permanente entre los diputados del Frente para la Victoria con el gabinete del gobernador. Como nexo actuarán algunos legisladores provinciales que también están buscando ocupar espacios: el grupo estará conformado por Dante Dóvena, Carlos “Cuto” Moreno y Mariano West (los dos primeros incondicionales históricos de Kirchner, el tercero ex intendente de Moreno con pasado duhaldista y un interregno como felipista), a los que se sumarán los legisladores provinciales Fernando “Chino” Navarro y Juan Amondarain. Y es probable que se agregue una mujer.

La idea de incrementar los contactos surgió hace un mes, tras una cena con Carlos Kunkel en la gobernación. Otra idea de esta comisión de enlace es aprovechar los contactos para impulsar el cumplimiento de la reforma de la carta orgánica de los municipios, para que las intendencias puedan participar en el cobro de impuestos. Pero la interlocución con el bloque K no es el único espacio en el que busca hacer pie Solá: un ejemplo podrá comprobarse el miércoles próximo en Madrid, adonde viajará el gobernador para entrevistarse con las autoridades del Banco Santander. La razón del viaje es una de las subsidiarias del Grupo Bapro, la prepaga Provincia Salud, aunque servirá para testar la actualidad de la relación bilateral con España tras la nacionalización de los hidrocarburos dispuesta por Bolivia.