Por Pablo Feldman
Desde Rosario
“La intuición que yo tengo por las cosas me marca la negativa”, dijo Carlos Reutemann a Radio Dos de Rosario ayer a primera hora. La respuesta a la pregunta acerca de cuál será su decisión final parecía terminante, pero unos segundos más tarde agregó que “es una enorme responsabilidad, lo tengo que estudiar con mucha seriedad, analizar una serie de variables. La cuestión es que cada día que nos levantemos sirvamos más a la Patria... si eso no acontece, Argentina no tiene destino...”, dijo el Lole reabriendo la posibilidad de su postulación. Cerca del mediodía, dio otra señal en ese sentido; ordenó a su ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo, la elaboración de un proyecto de ley que establezca la necesidad de reformar la Constitución provincial al solo efecto de determinar la caducidad de los mandatos en consonancia con el cronograma de elecciones anticipadas lanzado por Eduardo Duhalde el miércoles pasado.
De este modo, Reutemann refrenda la posición expuesta en la última reunión de gobernadores en la que impulsó la renovación total de los cargos electivos como presupuesto necesario para lanzar su candidatura. Pero la jugada del Lole va más allá y contiene otro dato en favor de su postulación: la elección de convencionales para la Constituyente que determinará la caducidad de los mandatos se haría el mismo día que las internas abiertas presidenciales. La razonable explicación de “ahorrar los gastos de otro comicio” que dio Borgonovo es la excusa perfecta para que cerca de dos millones de santafesinos concurran a las urnas de manera obligatoria para elegir convencionales, y según el cálculo de uno de los ideólogos de la convocatoria, “el Lole arrancaría desde Santa Fe para la interna contra Menem, mínimamente con el millón de votos que sacó en la última elección”. Los más optimistas agregan además que “De la Sota podría hacer lo mismo en Córdoba y debería hacerse en todas la provincias”, se entusiasman en el entorno del santafesino convencidos de que si ello ocurre, a nivel nacional no habrá otra alternativa que imitar el gesto a pesar de la resistencia que anunciaron algunos legisladores.
“Antes del viernes voy a anunciar mi decisión”, dijo Reutemann a la radio rosarina que lo entrevistó ayer a la mañana durante un cuarto de hora en el que el Lole dio alternativamente señales que daban por sentada su postulación y luego la desechaban. Pero lo más relevante sucedió un par de horas más tarde, cuando instruyó al jefe de la cartera política para que avanzara inmediatamente en la elaboración de una ley que establezca la necesidad de la reforma constitucional. “Yo estoy ofreciendo mi renuncia que es lo único que puedo hacer, los otros, los legisladores nacionales no depende de mí”, dijo el Lole avalando el “que se vayan todos” y destacando que “para que eso se haga bien debe haber una convención constituyente”.
La iniciativa que cuenta con el consenso del resto de los partidos con representación en la Legislatura santafesina determinaría una elección de convencionales constituyentes para el mismo día de la interna abierta nacional. “De ese modo se ahorraría el dinero y el tiempo que demanda otra elección”, dijo a Página/12 el ministro de Gobierno santafesino.
Paralelamente, operadores reutemistas reconocen que la obligatoriedad del comicio para constituyentes garantizaría la concurrencia de cerca de dos millones de votantes de los cuales “por lo menos un millón meterían además la boleta del Lole si es candidato en la interna contra Menem”.
La proyección más optimista incluye un panorama similar en Córdoba, con José La Sota como hipotético compañero de fórmula, “y ni hablar si se hace en Buenos Aires y el resto de las provincias en las que los gobernadores apoyan al Lole”, se entusiasman en el entorno reutemista.
Como estrategia no parece mala, y si el tema de la interna fuera eldeterminante en las cavilaciones de Reutemann, podría decirse que a pesar de su intuición –“que es negativa”– el Lole “esta marcando la cancha” –como él mismo suele decir.
Sin embargo, los que conocen a Reutemann desde antes de ingresar a la política no creen que el Lole sea de la partida. Aun cuando sostienen que es “ahora o nunca” y que es “todo o nada”, porque si Reutemann no es candidato a Presidente “no se postulara a nada más” sostienen con pesar.