El radicalismo K ratificó ayer en Córdoba su respaldo a la convocatoria de la Concertación Plural que hizo el presidente Néstor Kirchner. Cuatro gobernadores, 30 intendentes, algunos diputados y más de medio millar de dirigentes de todo el país se reunieron en el Encuentro de Río Cuarto para avanzar en la conformación del espacio, enfrentado a la conducción nacional de la Unión Cívica Radical, dirigida por Roberto Iglesias, a quienes acusan por su doble discurso. En el acto habló el gobernador de Mendoza, Julio Cobos, el primero en declararse cercano al Gobierno, quien formuló un duro cuestionamiento a la dirigencia máxima de su partido por su “zigzagueo permanente” y a quienes acusó de tener “un doble discurso” frente a la situación nacional. El mendocino aludió directamente a la polémica abierta donde comenzaron a plantearse algunas dudas en torno de la decisión de respaldar la candidatura del ex ministro Roberto Lavagna, que el Movimiento Federal Radical rechaza. Sobre el final de su discurso lanzó una advertencia al señalar que “si el Gobierno no se abre definitivamente y no llegamos a las respuestas, esto habrá sido sólo un intento”. Esta fue la segunda cumbre de los radicales K. Anteriormente ya se habían reunido en Vicente López, donde dieron el puntapié inicial de la propuesta.